lunes, 12 de agosto de 2013

TURQUIA: ESTAMBUL: Donde Comer, donde comprar y la noche

Donde Comer en Estambul

Buscar dónde comer en Estambul será una fiesta para los sentidos. La cocina turca ofrece al viajero una gran variedad de platos con abundantes especias e hierbas; es el fruto de una conjunción de muchas culturas y la riqueza del antiguo imperio otomano. Oriente y Occidente se dan la mano en su gastronomía.

En Estambul hay muchos puestos de comida rápida (büfe), que sirven los universalmente conocidos döner kebap (carne ensartada de cordero o pollo, que se corta en tiras y se sirve en pan de pita, acompañada de verduras y salsas) acompañados de la clásica bebida ayran. También resultan bastante económicos los lokanta, locales con los platos a la vista del cliente; en estos establecimientos es posible comer sulu yemen (caldo, guiso) o carne, también con el nombre de kebap, además de la sopa del desayuno tradicional por las mañanas. En la ciudad hay locales diurnos y nocturnos; los diurnos sirven durante el mediodía a la gente que trabaja por las zonas. Cierran por la tarde y no sirven bebidas alcohólicas. Otros establecimientos típicos son los kebapci (sirven doner kebap, brochetas, shish kebap o albóndigas), y los köfteci (donde se pueden consumir platos como albóndigas con piyaz, ensalada de alubias blancas). También se puede comer en los pideci (especialidad: pide y lahmacun, platos parecidos a las pizzas) o en los cafés cerca de la plaza Taksim, con cocina turco-europea y precios más altos.
Por la noche, los establecimientos abiertos son otros. Se trata de restaurantes con cocina tradicional o internacional, que sirven menús más caros (un precio medio puede salir entre 20 y 40 € por persona, y de ahí en adelante). En primer lugar están los meyhane o “casa de la bebida”, donde se empieza con mezze (entremeses) y se sigue con  una gran bandeja de platos fríos de carne o pescado para escoger. La otra opción son los ocakbasi, en los que la gente se sitúa alrededor de una gran barbacoa con carne de cordero, ternera o pollo. La bebida tradicional para acompañar los platos es siempre el raki (aguardiente típico de Turquía, con un fuerte sabor que recuerda al del anís).
Lokanta: Hay un local de este tipo, bastante recomendable, en una callejuela junto al nº 18 del Gran Bazar, y otro mas en Iskidal Cadessi, junto a la mezquita. En ambos se come bien, y son bastante baratos (5-10 € por persona).
Istanbul Enyojer: Este restaurante está ubicado en Sultanahmet (Incili Çavus Sok nª 25). Hay que probar el testi kebap. El menú está en español y los camareros también lo hablan.
Zinhan Kebap House (Ragıp Gümüşpala Cad 54 – 56): Un restaurante moderno y algo sofisticado, sin muchos turistas. Se encuentra en un pequeño centro comercial de tres plantas.
La casa de la Medusa (Yerebatan ,19-Sultanahmet): Un local céntrico, con buena atención y platos de calidad.
  
Compras en Estambul

Salir de compras en Estambul nos hará disfrutar del exotismo de la ciudad. Las artesanías propias de Estambul son muy similares a las del norte de África en general, con especial atención a las alfombras de seda o de lana, la confección en cuero curtido (tanto de accesorios, como bolsos o cinturones, como de ropa: chaquetas, pantalones, chalecos…), la joyería de oro y plata, la bisutería en sus cientos de variantes y diseños, las piedras preciosas y semipreciosas, los objetos de cobre y bronce y la cerámica.
Mención aparte merece la repostería, con el lokum (dulces turcos clásicos) o las mermeladas de rosas. Dentro del apartado gastronómico, señalar también las botellas de raki o las miles de especias disponibles en el Mercado Egipcio de las Especias. Otras compras interesantes son los juegos de té, las cajas de madera y, sobre todo, el ojo azul, una especie de amuleto de cerámica que es el talismán de la buena suerte de la ciudad, y ha de colocarse en la entrada de las casas.
El Gran Bazar y el Mercado de las Especias son los centros de las compras para todos los viajeros y turistas. En concreto, el Gran Bazar consiste en una zona de 80 calles con más de 4.000 tiendas y establecimientos de hostelería. Una curiosidad de este lugar es que los nombres de las calles se corresponden con las mercancías que se encuentran a la venta en los puestos. Nunca hay que olvidarse de regatean, ya que los comerciantes suben el precio de los artículos teniendo en cuenta que los tendrán que rebajar.
Aparte de los bazares, la zona de Sultanhamet ofrece al viajero tiendas de alfombras, coleccionismo, etc. a buenos precios; las calles que rodean al Gran Bazar también son un buen lugar para investigar, si se tiene tiempo y ganas. La calle Istikal, en Beyoglu, es una de las más comerciales de Estambul, y también con más vida (tanto diurna como nocturna). La zona de Nisantini es conocida como los “Campos Elíseos” de Estambul; en ella están las tiendas más elegantes de la ciudad. Y para los amantes de los centros comerciales, en la ciudad se encuentra uno de los mejores del mundo: se trata de Akmerkez (en Etiler, dirección Mar Negro), un centro de ocio con las mejores marcas internacionales.

Noche en Estambul
La noche en Estambul comienza con una cena, ligera o más copiosa, en uno de los locales típicos de la ciudad. Aparte de los ya mencionados anteriormente, merece la pena hacer una visita al barrio de Kumkapi, un lugar muy típico habitado por pescadores. Además de poder comer el exquisito blau fish, un pescado del Bósforo, lo mejor de esta zona es su ambiente: está plagado de gentes de la ciudad y en el ambiente reina la música y la cordialidad. Los distintos establecimientos atosigan a los turistas para que se sienten en las mesas, por lo que lo mejor es ocupar el primer lugar que nos parezca bien y así conseguir un poco de tranquilidad. Nuestra recomendación: ir un viernes o un sábado, cuando la animación es mucho mayor.

TURQUIA: ESTAMBUL: Como Moverse

Como Moverse por Estambul

Moverse por Estambul será más fácil de lo que nos esperamos. Estambul es una ciudad totalmente occidental en lo que respecta a las comunicaciones y los transportes. Incluso cuenta con Metro, como todas las ciudades importantes del continente europeo, aunque todavía no se ha completado el trazado.

En principio, para acceder a la zona europea antigua donde se encuentran los monumentos más destacables, hay que coger en Taksin un funicular que cubre un fuerte desnivel. El funicular llega hasta el Puente Gálata, también llamado de los pescadores, y  después tendremos que coger el tranvía. Sus ventajas: es rápido y las vistas son maravillosas; y su mayor desventaja: a veces, sobre todo en horas punta, va lleno de viajeros. Todos estos transportes públicos funcionan con tokens, unas fichas que se adquieren en las cabinas que hay a la entrada de los andenes (cuestan 1,10 liras).
Las paradas más importantes del tranvía (por lo menos, a la hora de visitar lugares de interés) son las siguientes:
- Kabatas: para coger los barcos que van por el Bósforo.
- Eminönü: desde aquí se llega al Bazar o Mercado Egipcio de las Especias (Misir Carsi). También están cerca la mezquita de Solimán, el Puente de Gálata y la Torre Gálata. Salen barcos turísticos que cruzan el Bósforo o hacia el Cuerno de Oro.
- Sultanahmet: para ver el Palacio Topkapi, Santa Sofía, la Mezquita Azul, el Hipódromo, el Pabellón de Azulejos y el Museo arqueológico.
- Old Bazar: es la que más cerca deja a los transeúntes del Gran Bazar.
Otra opción para trasladarse por Estambul es el taxi (taksi). Si exceptuamos las zonas de mucho tráfico, donde los atascos están a la orden del día, pueden ser una buena alternativa para moverse, sobre todo en estancias de tiempo limitado. Son de color amarillo y funcionan como en España: se paga una bajada de bandera más el tiempo indicado por el taxímetro. A partir de las 12 de la noche pasan a tarifa nocturna. Para grupos de cuatro o más personas, sale rentable coger un taxi en lugar de un autobús, sobre todo para distancias cortas. No hay paradas, sino que los taxis se cogen por la calle. Un aviso: si un taxista quiere pactar un precio sin poner en marcha el taxímetro, lo mejor es bajarse y coger otro taxi, ya que probablemente lleguemos a pagar el doble de lo que en realidad cuesta la carrera. Los dolmus son taxis compartidos con itinerarios fijos; el viajero indica su destino y los conductores calculan los precios.  Salen más baratos que los taxis y en ellos entran entre 8 y 11 personas.

Moverse por los Alrededores de Estambul

Estambul es una ciudad preciosa, pero merece la pena moverse por los alrededores de Estambul, y descubrir rincones menos urbanos y donde será más fácil percibir la mezcla de cultura oriental y occidental.

  


Para aquellos viajeros que tengan tiempo y quieran desplazarse a otros lugares desde Estambul, hay muchas compañías nacionales de autocares que realizan servicios regulares, frecuentes y rápidos, comunicando muchas ciudades y pueblos de Turquía. Las tarifas varían, pero suelen ser muy batatas. Las salidas se efectúan desde las estaciones de autocares (garajlar) en las grandes ciudades; en los lugares más pequeños, el autobús simplemente parte desde el centro de la población. Aunque en Estambul hay muchas otras estaciones de autobuses, la de Uluslararasi es la terminal principal, tanto para rutas interurbanas como internacionales. Es llamada por los turcos simplemente "otogar" y se encuentra en el barrio occidental de Esenler, a unos 10 kilómetros del centro.
Los barcos salen de diferentes puntos de los dos continentes cada 20-25 minutos. Aparte de los cruceros intercontinentales, hay otros que salen del puerto antiguo con destino a las İslas de los Príncipes, Yalova, Çinarcik y el Bósforo. Los ferris llegan a pueblos lejanos del Mar de Mármara, como Armutlu y Mudanza, en tan sólo una hora.

TURQUIA: ESTAMBUL: Barrios

Barrios de Estambul
El viajero difícilmente tendrá ocasión de conocer en su totalidad una ciudad tan grande e interesante como Estambul, a no ser que repita su visita en varias ocasiones. Por ello, de entre los barrios de Estambul destacaremos las zonas de Sultanahmet, el Gran Bazar y el Serrallo, los alrededores y otros puntos del Cuerno de Oro acogen también muchos lugares de gran interés

Sultanahmet: Es la zona turística por excelencia; en ella se encuentran Santa Sofía, la mezquita Azul y la cisterna de Yerebatan, por poner sólo tres ejemplos. Dentro se ubica El Serrallo, la colina cubierta de vegetación que marca el encuentro entre el Cuerno de Oro, el Bósforo y el mar de Mármara. Actualmente, la mayor parte de esta colina está ocupada por el complejo del Palacio de Topkapi.
Barrio del Gran Bazar: Beyazit, Çemberlitas y Suleymaniye. El Gran Bazar de Estambul no se parece a nada, a ningún otro lugar que se haya visitado. Es toda una experiencia deambular por él y dedicarse a contemplar las mercancías y regatear con los vendedores. Y para realizar otras compras, se pueden visitar el Mercado Egipcio de las Especias, el Bazar de los Libros, el Han Valide…
A través del Puente de Galata: Beyoglu y Taksim: La colina situada al norte del Cuerno de Oro, conocida como Beyoglu, siempre ha sido residencia de extranjeros y ubicación de las embajadas. Actualmente sigue siendo un centro de gran actividad comercial. Recomendamos cruzar el Puente de Gálata, visitar los barrios de los pescadores y disfrutar del maravilloso atardecer sobre el Bósforo. También es posible acercarse al otro lado, en donde hay muchos lugares interesantes, como el Monasterio Mevlevi o la Torre de Galata.
Fatih, Fener y Balat: Estos tres barrios son testigos de la increíble riqueza étnica de Estambul. En Balat residen los judíos, de origen griego y sefardí (españoles); Fener es el barrio griego desde la época de Constantino, y Fatih es una zona islámica ortodoxa.
Eyüp: Este “pueblo” es un lugar de peregrinación para los musulmanes, pues aquí descansan los restos de Eyüp Ensari, el portador del estandarte de Mahoma. Las calles que rodean la Mezquita de Eyüp están formadas por mausoleos de gente importante, pero en la colina están los enterramientos del pueblo, formando un precioso cementerio. En la cima de la colina se encuentra  el Café de Pierre Loti y sus maravillosas vistas.
La zona asiática: Aquí están los grandes barrios periféricos de Üsküdar y Kadiköy, que datan del siglo VII a.C. Üsküdar está situado frente a la Torre de Leandro, de donde partían las rutas comerciales hacia  Asia. En la actualidad este barrio es célebre por sus numerosas mezquitas. Ambos barrios cuenta con muchas zonas residenciales. Por su parte, Moda es un encantador barrio famoso por sus helados, y en Fenerbahçe hay un faro con un hermoso parque. Desde allí se llega caminando hasta  Bagdad Caddesi, una de las mejores calles comerciales de Estambul.

martes, 6 de agosto de 2013

GUATEMALA: El color de Centroamérica

El color de Centroamérica
De la herencia colonial de Antigua al mercado de Chichicastenango, la belleza del lago Atitlán y las imponentes ruinas de Tikal. Colores, perfumes y sabores de un país tan diverso como fascinante, donde la cultura maya sigue viva a cada paso.
Pero, ¿qué pasó con los mayas, por qué desaparecieron?”, pregunta alguien, medio distraído, mientras la combi va ingresando en las sinuosas calles de Chichicastenango, en Guatemala. El guía Haroldo sonríe, como debe hacerlo siempre que le hacen esta pregunta, y dice: “¿Desaparecer? Mire a su alrededor; éstos son, aquí están los mayas”.
Esta es la primera noticia para quien venga a Guatemala, entonces: que sepa que de los mayas va a ver mucho más que unas impresionantes ciudades abandonadas, porque su cultura sigue viva en muchas de las 23 etnias que pueblan el país. Antes que esta, teníamos otra información más urgente, pero que ya quedó vieja: les íbamos a contar que el 21 de diciembre no se acababa el mundo, pero a esta altura es de suponer que de eso ya se percataron todos. Sin embargo, hay una tercera noticia, y es mucho más interesante: resulta que Guatemala es un país hermoso y sorprendente, que concentra de todo en pocos kilómetros cuadrados: playas sobre el Atlántico y sobre el Pacífico, volcanes, valles, lagos, montañas y, culturas muy interesantes y vivas, que mantienen sus tradiciones. El país, como el resto del mundo, sigue aquí luego del 21D, y más que nunca invita a empaparse con sus colores, sus sabores, sus historias.
De que el mundo no se terminaba nos anoticiamos de boca de un mismísimo sacerdote maya: fataban unos pocos días para el 21 de diciembre cuando nos dijo que “no es el fin del mundo, sólo un cambio de era”. Luiz Ricardo Ignacio V., además de sacerdote maya, es también el creador del Museo de Máscaras Ceremoniales, en las afueras de Chichicastenango. No se jugó cuando le preguntamos qué traería consigo este cambio; su respuesta fue, por lo menos, amplia: “Puede que todo cambie para mejor o para peor, pero también puede que todo siga igual, depende de nosotros”. Ok. Eso sí, el museo es muy interesante, con decenas de máscaras de morería que cuentan cómo fue evolucionando esta larga tradición del tallado y los festejos en la zona. Están desde las que tienen más de 300 años de antigüedad, talladas en madera de cedro, hasta las actuales, de pino blanco y pintadas de vivos colores.
El mercado más popular
Lo verdaderamente imperdible aquí es el propio Chichicastenango, nombre que significa “Lugar de los chichicastes”, o de las zarzas. Son unas dos horas desde Ciudad de Guatemala por una autovía nuevísima, que viborea, trepa y se descuelga por entre cerros, volcanes y profundas quebradas. Todo el mundo viene a “Chichi”, como lo conocen aquí, por su impresionante mercado, probablemente el más colorido y animado de toda Latinoamérica. Funciona los jueves y domingos, y más que por sus productos –que no están nada mal–, es fascinante por su ambiente único. Aunque dicen algunos que ha perdido algo de su esencia, y ahora es más caótico y “global” –junto a tejidos y máscaras artesanales hay baratijas chinas–, es una experiencia fantástica perderse por las calles, más coloridas y ajetreadas que nunca, seguido por vendedores de todas las edades que hacen un culto a la insistencia. El regateo aquí no sólo es necesario, es una costumbre cultural sin la cual nada se compra. Soledad, que no mide más de 1,50 m y atiende con envidiable simpatía su puesto en el mercado, me pide 250 quetzales por un hermoso tapiz con flores bordadas. Contraoferto 130, y la negociación comienza. Diez minutos después –resistí todo lo que pude–, me voy con mi tapiz, por 160 quetzales. Para quien no esté acostumbrado, esta negociación puede resultar agotadora.
En el gimnasio municipal funciona el mercado de vegetales –¡impresionantes tomates!!–, y en otro espacio, el menos turístico y más auténtico mercado de animales, donde se intercambian cerdos, gallinas, vacas.
En un extremo del mercado está la iglesia de Santo Tomás, edificada –cuándo no– justo encima del que era un centro ceremonial maya. Allí sigue estando la escalinata de piedra de 20 escalones –representan a los 20 días del mes del calendario maya–, con varios fuegos encendidos, ya que el humo es una forma de comunicación con los dioses. En Santo Tomás fue hallado el manuscrito del Popol Vuh (Libro del Consejo o Libro de la Comunidad), que habla del origen del mundo según los k’iche, el pueblo de la cultura maya mayoritario en Guatemala: el k’iche es la más hablada entre las 23 lenguas originarias del país.
Ese templo aplastado por una iglesia hospedaba al abaj, un altar sagrado en honor a Huyup Tak´ah, dios maya de la tierra, que fue sacado a escondidas y llevado a la cima de un cerro cercano, donde hasta hoy se siguen realizando ceremonias rituales, para las que llegan sacerdotes de todo el país y de México. Desde una prudente distancia y en silencio, se pueden presenciar estas ceremonias, en las que a la deidad se le ofrece comida, cigarros, bebidas, flores, mientras las personas piden o agradecen.
Antes de irnos de Chichi recorremos el pintoresco hotel Mayan Inn. Desde los jardines, envueltos por el perfume de las orquídeas, vemos, justo enfrente, un fabuloso estallido de colores: es el cementerio local, donde a los padres se los entierra bajo lápidas blancas –pureza–; a las madres, bajo el turquesa –protección para las mujeres–; a los niños, con celeste; a las niñas, rosado, y a los ancianos, bajo el color amarillo, que es la protección del sol sobre la humanidad.
Un lago que seduce
Estamos en la tierra de los hombres de maíz, y no porque sea un alimento omnipresente en las comidas –que lo es–, sino porque el propio Popol Vuh cuenta que, luego de fracasar con el barro, la madera y el tzite, los dioses decidieron hacer al hombre de maíz. Y son ellos –los hombres– los encargados de sembrarlo, porque es símbolo de la fecundación de la Tierra. Entonces, siguiendo la cosmovisión maya, por cada planta se siembran tres semillas: una para que coma el pájaro, otra para Dios y la tercera para que germine. El 9 es un número sagrado para los mayas; es lo que tarda el maíz en germinar, lo mismo que el hombre en el vientre materno.
Lo cuenta Haroldo mientras a través de las ventanillas comienza a asomar, laderas abajo, el lago Atitlán, ese que, dicen, Aldous Huxley calificó como “el lago más lindo del mundo”. No sé si será para tanto, pero de seguro entraría en varios rankings. Ubicado en el departamento de Solalá, es un enorme espejo de agua rodeado de volcanes y laderas verdes, y a sus orillas, en todo su perímetro, hay una docena de pueblos indígenas, cada uno con sus características. Poco antes de llegar a la orilla pasamos por Sololá, capital del departamento, donde conviven tres etnias: k’iche’, tz’utujil y kaqchikel. Hay un alcalde “blanco” y otro indígena, y las decisiones se toman en conjunto.
La mejor manera de llegar a los pueblos del lago es en lancha, y por eso cruzamos los floridos jardines del hotel Atitlán, en San Francisco de Panajachel, para alcanzar el muelle y zarpar al mando del capitán Miguel, directo hacia el volcán San Pedro, justo enfrente, que se eleva hasta los 3.020 metros de altura.
En unos 25 minutos desembarcamos en el muelle de Santiago Atitlán, y la fascinación se renueva: en las calles de la considerada “capital de la nación Tz’utujil Maya” se ven las vestimentas tradicionales, y no para los turistas, sino simplemente porque todos –bueno, la gran mayoría– las usan a diario. Las mujeres lucen sus huipiles –blusas– mayormente blancos, con coloridos bordados: flores, figuras geométricas y aves, especialmente pavos, símbolo de la riqueza. En los hombres destacan los pantalones, también blancos y con los bordados en la parte inferior.
En otros tiempos esta villa fue escenario de terribles matanzas y horrores de la represión, que culminó en 1990 con un célebre alzamiento popular. Hoy es uno de los pueblos más turísticos del lago y un fuerte refugio cultural, donde tienen un rol central las cofradías, encargadas de mantener los rituales mayas para asegurar que el sol, la luna, las estrellas y los planetas continúen sus caminos, porque en el esquema mayor cósmico, el hombre tiene su parte en todas las cosas y debe ayudar a engrasar los ejes del universo. Aunque originalmente fueron organizadas por sacerdotes españoles para promover el Cristianismo, las cofradías pronto dirigieron sus esfuerzos a las creencias locales, y cada una lleva el nombre del santo o deidad a que se dedica.
Entre coloridos tuc-tuc –mototaxis– que llevan y traen pasajeros colina arriba, llegamos al centro de Santiago, siempre entre mercados callejeros, y visitamos la iglesia, donde también están presentes los 20 escalones de la simbología maya. A continuación, ascendemos un poco más entre calles empedradas, y entre callejones y pasadizos llegamos a la cofradía que custodia a Maximón, el “abuelo del pueblo”, que según la leyenda, hace muchos años eliminó el mal del lugar. Sobrevivió a la persecución de la iglesia y hoy acuden a pedirle y agradecerle, encendiendo velas y dejando pañuelos a modo de ofrenda. El cófrade le prende velas y hace una oración por cada uno de los presentes.
De regreso en la lancha, hacemos un paso por el bello pueblo de Santa Catarina Palopó, cuyos habitantes pertenecen al pueblo Maya-Kakchikel y también mantienen sus tradiciones con orgullo. A diferencia de Santiago, aquí la vestimenta tradicional es de un turquesa intenso, incluidos sombreros y turbantes. Hay aguas termales, senderos panorámicos, mirador y playas, pero el tiempo sólo nos alcanza para visitar la antigua iglesia colonial, con su campanario de 1726. Ya entrada la noche desembarcamos en el vecino pueblo de Panajachel, donde una breve salida nocturna nos demuestra que la calle Santander es más que animada, con restaurantes, bares y discos.
El esplendor de Antigua
Calles empedradas, fachadas barrocas, farolas coloniales. Desde poco después de su fundación, en 1543, fue considerada una de las tres ciudades más hermosas de las Indias Españolas, y si un gran terremoto no hubiese detenido su desarrollo, la que fue capital del Reino de Guatemala –que comprendía también a los actuales Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y el estado mexicano de Chiapas– se habría convertido en una de las más grandes ciudades de América.
Aquello que podría haber sido pero quedó a medio camino es lo que se vislumbra en las calles de la ciudad de La Antigua, hoy un gran centro turístico repleto de tiendas, restaurantes, bares y frentes coloridos. La ciudad es un gran museo al aire libre, con sus tejados coloniales, sus conventos y sus iglesias, y si no fuera tan bonita y tranquila, nos veríamos tentados a no salir de nuestro hotel, que es mucho más que un hotel. Los gruesísimos muros que protegen lo que alguna vez fue un convento, hoy albergan el hotel cinco estrellas Casa Santo Domingo, que cuenta con el Paseo de los Museos, que aloja los museos Colonial, Arqueológico, de Arte Precolombino y Vidrio Moderno, de la Platería, de Artes y Artesanías populares de Sacatepéquez y de la Farmacia. Además, hay otras dos salas dedicadas a exhibiciones temporarias, claustros y criptas. Impresionante.
Tanto como las ruinas de la Iglesia y convento de las Capuchinas, consagrada en 1736, o la iglesia de la Merced, cuya fachada barroca expresa el sincretismo religioso: junto al cordero de Dios se ven las guías de la vid, para los mayas, un cordón entre el cielo y la Tierra.
Luego de pasar más de una vez bajo el Arco de Santa Catalina –la imagen más clásica de Antigua–, la visita finaliza en el Museo de Jade, una piedra semi preciosa muy importante en el país, previo paso por la increíble dulcería Doña María Gordillo. Unas deliciosas canillitas de lece por aquí, unos esponjosos chilacayotes en dulce por allá, y a seguir viaje.
Las voces de los ancestros
Son 50 minutos de vuelo entre Ciudad de Guatemala y Flores, capital del departamento de Petén. Aquí el calor y la humedad aprietan; a diferencia del resto país, estamos a nivel del mar, muy cerca de México y de Belice, para disfrutar de la frutilla del postre: el Parque Nacional Tikal, la mayor ciudad maya conocida hasta ahora, que permaneció oculta por la selva hasta 1848, cuando fue descubierta. En 1979 la Unesco la declaró Patrimonio de la Humanidad y hoy el Parque tiene 576 km2, aunque sólo un tercio del total ha sido desenterrado. Por ello, junto a los senderos y pirámides se ven altos montículos de tierra: pirámides y monumentos que aún no fueron descubiertos, y ayudan a que nos imaginemos cómo se encontró el lugar.
Aún así, hay muchísimo para ver. La caminata comienza bajo un enorme ceibo –o iasché , al que los mayas veneraban como “árbol de la vida”–, y se prolonga por unas horas. Las ruinas y templos van apareciendo como al pasar, en medio de la selva, y son impresionantes. Subimos al Templo IV, que, con 70 m, es la estructura más alta del mundo maya. Fue construido alrededor del 741 y se le denomina “Templo de la serpiente bicéfala”. Desde la base de la crestería, la vista del lugar es impactante, con las cimas de las pirámides sobresaliendo entre la selva cerrada.
A varias de las pirámides no se permite subir, y me alegra: es tentador trepar los escalones, pero que lo hagan cientos de visitantes cada día debe ser devastador. Igual, subimos las escalinatas del Templo III y recorremos luego el Mundo Perdido y la Plaza de los Siete Templos, para finalizar en la gran Plaza Mayor, corazón del Parque, con estelas y altares, las acrópolis Norte y Central y los Templos I (del Gran Jaguar y II (de las Máscaras).
Tikal significa “lugar de voces”, porque en este maravilloso lugar los mayas se comunicaban con los dioses. Entonces, es mejor hacer silencio. Posiblemente no exista un lugar mejor para callar. Para callar y escuchar.
IMPERDIBLE
Semana Santa y otros festejos
No importa si se es creyente o no, o qué religión se profesa; la Semana Santa en Guatemala es tan colorida y festiva que envuelve a todos con su encanto. Las multitudinarias procesiones se suceden en todo el país, aunque una muy especial es la de Anti-gua, a la que por aquí llaman “la Jerusalén de América”. En Anti-gua se conmemora la Pasión de Cristo con altares especiales dentro de las iglesias, procesiones, velaciones, Vía Crucis y an-das que llevan las imágenes so-bre espectaculares alfombras que tapizan las calles, hechas con flores, frutas, verduras y aserrín de madera teñido de colores. Las confeccionan las hermandades o familias en honor al paso de la procesión. A quienes cargan las imágenes sobre sus hombros les llaman “cucuruchos”, por el sombrero que utilizan, y visten túnicas de color morado o negro, según el día y el santo que cargan. Guate-mala es una explosión de colores durante todo el año, pero se po-tencia a límites inimaginables en Semana Santa. Otro festejo es-pecial, sobre todo en las ruinas de Cobán, es el Rabin Ajau, de origen maya (q’eqchi), del 21 al 26 de julio. Y en Chichicaste-nango es importante la celebración de Santo Tomás, que culmina el 21 de diciembre.

MINIGUIA

QUE HACER. Por su ubicación, su variada geografía y su historia, Guatemala ofrece todo tipo de actividades. Por las ruinas mayas, es muy importante el turismo histórico y arqueológico, pero también está posicionándose fuertemente en ecoturismo (la observación de aves, con más de 700 especies, es muy importante), turismo de comunidades y turismo aventura. Son comunes las prácticas de trekking, mountain bike, rafting, cabalgatas, parapente y canopy, entre otras actividades.

CUANTO CUESTA. Entrada al Museo de Máscaras Ceremoniales de Chichicastenango, 25 q (poco más de US$ 3); máscaras, de 800 a 1.500 q (US$ 100 a US$ 190). Una comida promedio se ubica entre 40 y 150 q (5 a 18 dólares), el almuerzo completo en restaurantes de campo cuesta 130 quetzales (US$ 16,5). Aéreo ida y vuelta de Ciudad de Guatemala a Flores, US$ 286 (Taca). Bus desde el aeropuerto de Flores hasta el Parque Nacional Tikal, 100 q (US$ 12,6) ida y vuelta. En-trada a Convento de los Capuchinos en Antigua, 40 q (US$ 5). Tour de café de dos horas, US$ 18. Excursión de rafting por el río Cahabón, desde US$ 20 hasta US$ 45.

MONEDA. La moneda de Guatemala es el quetzal, y cotiza a razón de 7,9 quetzales por cada dólar.

CUANDO IR. La temperatura es similar todo el año, aunque la estación seca va de noviembre a mayo; el resto es más lluvioso pero con buenas ofertas hoteleras. Semana Santa es muy especial, porque es una de las mayores fiestas nacionales y se vive intensamente en todo el país, con procesiones y coloridas alfombras.

ATENCION. Excepto en algunos hoteles, el agua no es potable, por lo que es necesario comprar agua embotellada. Para visitar Tikal se recomienda llevar abundante agua, ropa para clima cálido, calzado cómodo, gorra, bloqueador solar, impermeable y repelente para insectos. El Parque abre todos los días de 6 a 18.


INFORMACION
Embajada de Guatemala en Buenos Aires, (011) 4313-9180.
(00502) 2421-2800.
info-lobby@inguat.gob.gt
www.visitguatemala.com

VIAJEROS: Una calle de Viena

Una calle de Viena
Un viaje en el tiempo lleno de color local en la capital austríaca. Por Eduardo Pogoriles
Se llama Argentinierstrasse, o sea, “la calle de los argentinos”. Son unas pocas cuadras en el centro histórico de Viena, cerca de los jardines de Belvedere. La calle abunda en antiguas mansiones construidas entre 1880 y 1910 como el Palais Wessely, el Kranz, el Falkenstein y el Erlanger, entre otros. Algunos de estos palacios se reciclaron como embajadas o academias, otros se demolieron. Una placa cuenta que el nombre, Argentinierstrasse, data de 1921. Antes se llamaba Alleegasse y el cambio fue para recordar la ayuda que Argentina, en la presidencia de Hipólito Yrigoyen, envió a los hambrientos vieneses durante la Primera Guerra Mundial.
La calle de los argentinos corre entre la avenida Wiedner Gürtel y la Karlsplatz, la céntrica plaza donde está la iglesia Karlskirche, que desde 1737 es una de las más elegantes de Viena y un ícono del estilo barroco. El guía cuenta que allí se casaron muchos famosos, entre ellos la actriz Heddy Lamarr y Fritz Mandl, el millonario fabricante de municiones que tenía la sede de su empresa –la Hirtenberger Haus– en una esquina de Argentinierstrasse y vivió en nuestro país en la década de 1940. Otra plaza más chica, Sankt Elisabeth Platz, está a mitad de camino en esta calle, donde no falta una academia de baile con toques rioplatenses, “Ayres de Tango”, en Argentinierstrasse 17.
Por aquí están las embajadas de Grecia y España, pero a los austríacos el nombre les suena porque el edificio de la radio nacional de Austria –la ORF Funkaus– está en Argentinierstrasse 30. El guía cuenta que cuando esta calle aún se llamaba Alleegasse era la residencia de algunas de las más ricas familias de Viena. Y llama la atención sobre un moderno edificio en el número 16, donde hay negocios y un restaurante. Hay que imaginarse lo que había antes en esa misma dirección: era el Palais Wittgenstein, la mansión del magnate del acero en Austria, Karl Wittgenstein, padre de Ludwig, el filósofo. “En los salones de este palacio tocaban músicos como Brahms, Mahler y Strauss. Además, Karl era el mecenas del pintor Gustav Klimt”, dice el guía. Y cuenta que entre los años 1938 y 1945 el Palais Wittgenstein fue nada menos que la sede de las autoridades nazis en Austria, hasta que en la posguerra fue demolido para hacer el edificio actual.
Caminar puede ser un viaje en el tiempo, sobre todo en Viena. La ciudad hace pensar en un baúl repleto de recuerdos que no terminan de ser sólo eso, recuerdos.

EUROPA: NORUEGA: OSLO: bajo el sol de primavera


Oslo, bajo el sol de primavera

Calles, museos y cafés clásicos de la ciudad escandinava. La moderna Opera, el bar de hielo, un parque de esculturas y las huellas de los artistas Ibsen y Munch.

La era del deshielo. La nieve empieza a retroceder, el hielo de parques y veredas a quebrarse y diluirse, y algún tímido brote se anima a adelantarse a las primeras temperaturas que superan apenas los cero grados. Se inicia la primavera en el hemisferio norte y Oslo, la capital de Noruega, parece desperezarse.
Las horas de luz se estiran día a día y el sol, tan esquivo en los últimos meses, anima a los oslenses a salir a las calles y sentarse a las mesas en las veredas de los bares –que se verán repletas en verano– y a poblar parques y plazas.
Pero nosotros llegamos con un objetivo en particular, y vamos directo al grano: la Galería Nacional exhibe el cuadro más famoso del artista más famoso de Noruega: “El Grito”, de Edvard Munch. Pero el área que reúne su obra –junto a las de otros apellidos de peso, como Cèzanne o Manet– está cerrada. “La están acondicionando para la exposición”, nos informan, y sabemos que “la exposición” es la celebración de los 150 años del nacimiento de Munch, que se cumplen este año. Aunque los festejos ya comenzaron con exhibiciones itinerantes y otras actividades, la ciudad se prepara para esa “gran exposición”, que comenzará en junio y reunirá más de 250 obras del artista, que se podrán ver en simultáneo en la Galería Nacional y el Munch Museet. Sin dudas, una excelente excusa para hacerse una escapada y disfrutar del país de los vikingos y su exuberante naturaleza.
Con “El Grito” silenciado, ponemos rápidamente en marcha el plan B y caminamos hasta el Museo Munch, junto al Jardín Botánico, en Tøyen, barrio de inmigrantes repleto de puestos de kebab, peluquerías y supermercados con miles de especias. En el Munch Museet, además de una sala dedicada al artista, hay videos sobre su vida y obra, y una exposición de plásticos nórdicos.
La ciudad frente al fiordo

Una vez saciado –a medias– el apetito por Munch, nos llaman las calles de la ciudad. Una buena manera de empezar a conocer el centro de Oslo es recorrer la Karl Johan’s Gate, la peatonal más concurrida. Desde la Estación Central hasta el Palacio Real son unas 12 cuadras, que reúnen buena parte de lo esencial de la ciudad: la catedral, el edificio del Parlamento o Stortinget y el antiguo Teatro Nacional, justo enfrente de la casa natal del poeta y dramaturgo Henrik Ibsen, transformada en un museo que recorre su vida y obra. Sus pasos también se pueden seguir en el célebre Grand Café, que Ibsen solía frecuentar. Enfrente, en la esquina del Parlamento, el clásico y elegante café Christiania recuerda el nombre que la ciudad llevó durante 300 años, hasta 1924.
Menos autos, más peatones
Oslo está en medio de lo que aquí se califica como la mayor transformación en décadas, con la recuperación de áreas abandonadas o en desuso, que se reintegran al tejido urbano. El mayor cambio se nota en la costanera del fiordo, donde el túnel Operatunnelen está haciendo desaparecer los autos y permitiendo demoler autopistas elevadas para construir zonas peatonales. Allí, en una zona antes de containers y máquinas oxidadas, se construyó la impresionante Opera, un súper moderno edificio blanco, de líneas rectas y de grandes ventanales que, además de ser la principal sala de conciertos y ballet del país, se convirtió también en uno de los paseos preferidos cerca del centro. Largas rampas permiten acceder a los techos, entre desniveles y ventanales, y contemplar parte de la ciudad y el fiordo de Oslo.
Locales y turistas suben aquí para entibiarse con el sol primaveral y divisar, en una de las colinas que rodean el centro urbano, la enorme rampa de saltos del Holmenkollen , con su museo y simulador de esquí, o aquí nomás, enfrente, la Fortaleza de Akershus, con su castillo medieval y sus museos.
Unos pasos más allá está Tjuvholmen , zona costera recientemente recuperada y en pleno crecimiento, que despliega una moderna arquitectura y una popular costanera con cafeterías y vistas al fiordo.
Tjuvholmen y el vecino Aker Brygge, con su costanera de madera y sus yates fondeados, son otros hitos de este “nuevo Oslo”, que se abre al fiordo y al sol. Llegaron los bares y shoppings con las tiendas de moda, y aquí, los primeros soles de la primavera se viven más que en ningún otro sitio.
Pero si empezamos esta visita con un artista, la terminamos con otro. Con Gustav Vigeland, considerado el máximo escultor del país y creador del Vigelandsparken, un enorme parque en el que se exhiben más de 250 llamativas esculturas, entre ellas el Monolito – Monolitten –, un bloque de granito de 17 metros con 121 figuras humanas desnudas y entrelazadas, y el niño enojado – Sinnataggen –, que hasta se identifica como símbolo de Oslo. El artista vivió en la cercana casa de Kirkeveien, hoy Museo Vigeland.
Para la noche de despedida, se impone un brindis en el Ice Bar o Bar de Hielo, donde la barra, las sillas, las paredes, los vasos... bueno, todo, es de hielo. La temperatura ambiente es de –5°C, y es templadita: en la calle, el termómetro marca –7°C. Es que en los primeros días de primavera, a las noches aún les resulta difícil olvidarse del invierno.

IMPERDIBLE
Museos y bosques
 Una aldea rural fina y elegante, a 10 minutos del centro. Así podría describirse rápidamente a la península de Bygdøy, un particular barrio residencial de Oslo po-blado de bosques y parques y una variada flora. Aquí son muy populares los paseos al aire li-bre, especialmente en verano, y también las playas sobre el fiordo, incluida una nudista. En Bygdøy está la granja real (Kongsgård) y el palacio real de Oscarshall, pero otro gran atractivo son sus museos, especialmente el de los Barcos Vikingos, que exhibe los dos barcos de este tipo mejor conservados del mundo, construidos en el siglo IX. También están el Museo Marítimo; el Kon-Tiki, con em-barcaciones y objetos de las expediciones del explorador Thor Heyerdah; el museo Fram, que homenajea la exploración polar noruega; el del Holocausto y el del Pueblo Noruego. Es recomendable llegar en ferry desde Aker Brygge, para disfrutar de buenas panorámicas.

MINIGUIA
ATENCION. Es recomendable adquirir la Oslo Pass, con descuentos y acceso gratis a transportes y museos. Por 24 hs, US$ 46; por 48 hs, US$ 67.

INFORMACION
En Bs. As., (011) 3724-1200.
 www.noruega.org.ar
 www.visitoslo.com/es

BRASIL: SOCORRO Aventuras entre morros

Aventuras entre morros

El entorno natural de Socorro, a 140 km de San Pablo, es ideal para practicar arborismo, trekking y turismo rural.

Rafting con adrenalina y diversión para todos en el Río do Peixe, que atraviesa el Parque do Monjolinho.

Rafting con adrenalina y diversión para todos en el Río do Peixe, que atraviesa el Parque do Monjolinho.

Hay que observar bien para distinguir un cuadradito anaranjado recortado en la selva verde que cubre el morro de enfrente. Lo miramos desde la cumbre de un cerro más alto. Las cosquillas inquietan el estómago cuando tomamos conciencia de que allí es donde terminará el vuelo que estamos por comenzar... cuando demos cinco pasos por la plataforma de roca y nos impulsemos hacia el vacío. Nos deslizaremos por el cielo colgados de un cable. Parece que el susto no se nos pasará jamás, pero rápidamente, la gloriosa sensación de volar y la belleza, nos habrá despejado cualquier sentimiento que no sea la dicha.

El vuelo es parte de una tirolesa de un kilómetro de largo entre dos picos de las Sierras de Mantiqueira . Estamos en Socorro , una pequeña ciudad que es polo de deportes de aventura, a 140 kilómetros de San Pablo y a 110 de Campinas . Socorro se destaca porque promueve un plan para que los parques naturales vayan adaptando las actividades para que puedan ser disfrutadas por todos, incluyendo a quienes tienen movilidad reducida o capacidades diferentes.

Naturaleza en movimiento
 La formidable tirolesa en la que se vuela a 60 kilómetros por hora y que se engancha con otras dos para llegar al pie del morro, es una de las actividades del Hotel Fazenda Parque dos Sonhos, uno de los parques del lugar, en el corazón de la Mata Atlántica. El terreno de montañas amables, selva y ríos es perfecto para esta clase de turismo: bellísimo para contemplar y vivaz, irregular y variado para disfrutar de la naturaleza en movimiento.

Entre los árboles de la selva que rodea al hotel otros cables forman puentes y sendas de maderas colgantes que van de árbol a árbol, para practicar “arborismo”. Los audaces recorren –a 15 metros del suelo– 800 metros con obstáculos y terminan con dos tirolesas de 200 y 250 metros.

El vértigo se paladea también andando por paredes de rocas. El cuerpo desafía la fuerza de gravedad y la vista se extasía con los paisajes mientras se baja 25 o 50 metros en rapel.

El Parque do Monjolinho reserva un rapel para auténticos valientes: el descenso es desde una plataforma a 30 metros de altura, sin paredes de roca, sólo en el vacío.

En este parque también hay diferentes maneras de divertirse en las aguas del Río do Peixe: el acqua-ride , en flotadores individuales para navegar acostado boca abajo, por los sectores más tranquilos y por los rápidos, un rafting que atraviesa más de 20 rápidos en 7 km y una travesía llamada bóia-cross , sobre cámaras de camión, remando con las manos. La seguridad es extremada en todas las actividades.

Chacras y cultivos
 El territorio es de Mata Atlántica y de fazendas, chacras, algunas de las cuales también están acondicionadas para el turismo. La Fazenda Campo Dos Sonhos recibe a los visitantes para mostrarles cómo se cultivan las verduras en la quinta, cómo se procesa el café desde la cosecha, cómo se hacen dulces y licores. En un vagón tirado por un tractor se recorren corrales de gansos, cabras y vacas; en mansos caballos se pasea bajo la sombra y junto a la laguna, donde hay botes a pedal. Por una incipiente ruta de turismo rural, se merienda en una casita del campo, de los abuelos de los dueños, donde le servirán un banquete infinito de panes dulces o saborizados, tortas, quesos, buñuelos, café, chocolate.

El paisaje serrano es encantador. Socorro es un suave paisaje montañoso de pintura naif. La tierra es un tapiz hecho de paños verdes de plantaciones de caña de azúcar o café, divididos por cercas de palos, arroyos o caminitos de tierra. Hay una vieja y hermosa casita de colonos italianos, con patos en un estanque, árboles frutales, gallinas blancas subidas a un tractor y un jardín con flores. Una señora nos saluda, con un pañuelo en la cabeza y un vestido azul con lunares blancos. El cielo del día es blanco; las tardes son tórridas y, en las noches, la fiesta de las estrellas brilla. Sobre los arroyos se reúnen las luciérnagas con sus delicadas luces verdes. Otra fiesta que imita la del cielo.



INFORMACION

Area de Turismo de la Embajada de Brasil en Argentina: 4515-2400

turismo@brasil.org.ar

www.estanciadesocorro.com.br

www.socorro.tur.br

BRASIL: PARATY: la historia y la naturaleza exuberante


Paraty, la historia y la naturaleza exuberante

Selva tropical, playas paradisíacas y un increíble casco antiguo definen este destino del estado de Río de Janeiro.
Cuando era pequeño escuché que alguien hablaba sobre Paraty. Pensé que iba a ser mi destino, mi lugar. Hace ocho años me mudé. Jamás había pisado la ciudad pero vine con una certeza: iba a ser mi casa. No me equivoqué”, comenta Aecio Sarti, un artista de cabello entrecano y ojos azules, que eligió establecerse a 230 kilómetros al sur de Río de Janeiro. A orillas del mar instaló un atelier donde recibe visitantes deseosos de admirar sus obras. No resulta difícil imaginar por qué Sarti no necesitó ver para creer. Su única guía era un relato. Una referencia quizás relacionada con puestas de sol, historias de corsarios y tiempos coloniales en los que el oro y luego el café movilizaron la ciudad.
A mitad de camino entre Río de Janeiro y San Pablo emerge Paraty. El poblado de casas blancas e impolutas descansa sobre la Costa Verde de Brasil. En su geografía las fronteras se difuminan y encuentran su fin en aguas cálidas de color esmeralda.
Paraty es una postal antigua que vive en el presente. Por sus calles el viajero encuentra carruajes, construcciones con simbología masónica y escenarios que se mantienen intactos a pesar de tener más de cuatro siglos de historia. El empedrado es el mismo sobre el que, cientos de años atrás, caminaron esclavos, comerciantes y marineros. Existen dos formas de transitarlo: la de los locales y la de los turistas. Los pes de moleque (como los lugareños llaman a los adoquines) son un desafío para el recién llegado que, por temor a caerse, se concentra más en el piso que en los detalles del paisaje. Los paratienses, en cambio, resuelven la situación con la precisión de los equilibristas, sin la necesidad de mirar el suelo para avanzar. Quizás el reto que impone el lugar tenga por objetivo desacelerar el ritmo del visitante y obligarlo a volver sobre sus pasos. Quién sabe. Pero lo cierto es que, con el transcurso de los días y al sumergirse en el juego de contemplar sin miedo, el turista aprende a caminar como un vecino más.
Belleza protegida
El centro histórico de Paraty se compone de 33 manzanas y tiene 400 edificaciones coloniales. Las casas de techos de tejas, paredes blancas y marcos coloridos transportan a la época del imperio portugués. Las calles también actúan como un túnel del tiempo: son un museo a cielo abierto con iglesias antiguas, un fuerte rodeado de cañones de la Guardia Real y un muelle plagado de escunas (réplicas de antiguos barcos).
En los tiempos de esplendor, Paraty llegó a ser el segundo puerto más importante del país. Allí amarraban embarcaciones que llevaban oro y diamantes hacia Minas Gerais y se traficaban esclavos. Por los ataques de piratas, que se escondían en la bahía para asaltar los barcos, la Ruta del Oro fue modificada en 1728. Los tiempos de riqueza y empleo se transformaron en largos períodos de decadencia económica. La abolición de la esclavitud, en 1888, fue otro gran golpe que impulsó la mudanza de los pobladores –que eran servidos por criados– a otros destinos. “Hasta 1950 muy poca gente visitaba la ciudad. El aislamiento en el que cayó Paraty permitió la conservación de la arquitectura y la cultura local”, relata Gustavo, un guía turístico que se crío en estas tierras y experimentó la llegada de visitantes a una ciudad, hasta entonces, perdida.
Las islas y el mar
La riqueza cultural y arquitectónica de Paraty es innegable pero no es su único atractivo. Su geografía también tiene mucho para ofrecer. Morros frondosos plegados sobre el mar, cascadas escondidas, piletas naturales rodeadas de rocas y 65 islas distribuidas sobre aguas turquesas y esmeraldas, son algunos ejemplos.
Las excursiones que proponen las agencias turísticas de la ciudad tienen opciones tanto para quienes deseen adentrarse en la mata atlántica como para los que prefieren disfrutar en altamar.
Para los visitantes que optan por mantener los pies sobre la tierra una opción recomendable es contratar un jeep tour por la selva. Los vehículos, con asientos enfrentados y sin ventanillas, son ideales para admirar la exuberancia de la vegetación. Durante el trayecto, que atraviesa la Ruta Real y el Camino del Oro, se hacen una serie de paradas. Una de ellas en la cascada “do Tobogã”, una piedra inmensa en forma de tobogán sobre la cual corre el río y los nativos se arrojan a toda velocidad. Las destilerías de cachaça son otro destino en el que vale interrumpir el viaje. Irse de Paraty sin degustar esa bebida típica del litoral brasileño sería volverse con una experiencia incompleta.
El mar y las islas que integran la bahía de Paraty también invitan a dejarse seducir. Embarcaciones coloridas, salidas de un cuento de aventura, son el medio para perderse mar adentro. La excursión incluye un almuerzo a bordo, en algunos casos música en vivo y espacios para tomar sol, disfrutar del paisaje o dormirse con el balanceo suave del agua. La travesía de cinco horas propone dos paradas de cuarenta minutos cada una en las que el viajero puede saltar del barco e ir nadando a una isla –para los menos intrépidos el trayecto puede hacerse desde un cómodo gomón a motor–, tirarse panza arriba a tomar sol, practicar snorkel o nadar entre peces.
Farolas
Son las ocho de la noche de un sábado. El sol comenzó a bajar y en las posadas encienden las farolas, que cubren de reflejos el adoquinado. Las mesas de los bares y restaurantes empiezan a poblar las calles, que horas más tarde estarán invadidas por turistas de todas partes del globo y también de Brasil (paulistas y cariocas suelen ser huéspedes frecuentes, sobre todo durante los fines de semana).
La ciudad tiene una amplia oferta gastronómica, que combina calidad y precios accesibles. Ejemplos de ello son el Margarida Café, uno de los más concurridos de Paraty y dedicado a la cocción de pescados, frutos de mar y carnes, o el Casa do Fogo, un pequeño y acogedor restaurante, donde la especialidad de la casa son las comidas flambeadas en cachaça. El lugar se ubica en la Calle del Fuego, donde tiempo atrás iban los marineros para calmar sus pasiones.
Después de la comida, locales y visitantes se entremezclan en bolichitos en los que, con el correr de la noche, las mesas y sillas se corren para crear una pista improvisada. No hay lugar que no esté amenizado por melodías de músicos tocando en vivo. Afuera espera una ciudad fundada en las costas del Atlántico, un lugar donde el arte, el pasado y la naturaleza se conjugan, en perfecta armonía.
MINIGUIA
COMO LLEGAR. Aerolíneas Argentinas vuela de Buenos Aires a Río de Janeiro desde 3.362 pesos (ida y vuelta, www.aerolineas.com.ar). LAN realiza el mismo trayecto desde US$ 956 en Económica y desde US$ 1.156 en Premium (www.lan.com).
El traslado desde el aeropuerto de Río de Janeiro hasta Paraty cuesta desde US$ 78 (servicio regular) hasta US$ 182 (servicio privado). El viaje dura 3 horas. Las tarifas son por tramo e incluyen impuestos (www.paratytours.com.br).
DONDE ALOJARSE. En la Pousada Do Ouro, habitación standard, US$ 200. Una habitación de categoría superior, US$ 259, y una suite, US$ 324 por noche, con impuestos, desayuno, piscina, sauna y acceso a Internet. La posada se ubica en el centro histórico de Paraty. 
En la Pousada Arte Urquijo la habitación suite standard cuesta US$ 254 por noche. La posada se ubica en el centro histórico de Paraty e incluye desayuno y TV con cable.
CUANTO CUESTA. El paseo en escunas por las islas de la bahía cuesta US$ 33 por persona y US$ 20 el almuerzo a bordo. La excursión dura 5 horas e incluye dos paradas de 40 minutos. Además, se provee máscara y snorkel.
El “jeep tour” con guía por el Camino del Oro hasta la cascada do Tobogã cuesta US$ 47 dólares y US$ 39 el almuerzo en el restaurante Vila Verde, emplazado en medio de la selva, donde el turista se puede bañar en la cascada y apreciar el paisaje.
Un city tour con guía por el centro histórico de la ciudad sale US$ 78. El paseo contempla diferentes paradas en museos, iglesias, edificios antiguos, monumentos y el emblemático fuerte de Paraty.
INFORMACION
Comité Visite Brasil de la Embajada de Brasil en Buenos Aires: Cerrito 1350, entrepiso. Teléfono: 4515-2422, turismo@brasil.org.ar
www.brasil.org.ar
www.visitbrasil.com
www.paraty.com.br
www.paraty.tur.br

CHINA: HONG KONG: donde la vanguardia hace historia

Hong Kong, donde la vanguardia hace historia
Mezcla de modernidad y tradición, espiritualidad y consumismo, este destino convoca con su perfil futurista y sus costumbres ancestrales, en el sur de China. Sus calles, su historia y su gente en el cauti
Con sus luces titilantes, los rascacielos vidriados que rodean la bahía y el puerto Victoria convierten el paisaje nocturno de la isla de Hong Kong y Kowloon en una postal futurista.
La ex colonia británica, que en 1997 volvió a estar bajo la tutela de China, comprende la isla de Hong Kong, Kowloon y los Nuevos Territorios.
 Los icónicos “juncos” con velas rojas ofrecen paseos embarcados. Al fondo, el Centro de Convenciones.
Con sus luces titilantes, los rascacielos vidriados que rodean la bahía y el puerto Victoria convierten el paisaje nocturno de la isla de Hong Kong y Kowloon en una postal futurista.
El cuerpo propone y el alma dispone. Porque aunque lo más saludable sería recuperar la energía y la lucidez perdidas en las casi treinta horas de vuelo que separan Buenos Aires de Hong Kong, por el contrario, se decide no perder un minuto después de hacer el check-in en el hotel y salir a explorar este enigma del Lejano Oriente. No importa si el reloj biológico reclama un jueves que nunca se vivió: en la isla de Hong Kong hay fiebre de viernes por la noche y multitudes con rumbo incierto le imprimen un ritmo eufórico a las escaleras mecánicas, los puentes peatonales laberínticos y las calles que destilan neón. Definitivamente, “este infierno está embriagador”, diría una bella canción.
El primer contacto con la metrópoli situada al sur de la República Popular China impacta de lleno en los cinco sentidos, empezando por la sucesión infinita de estímulos visuales y aromas que pronto erizan la piel. Los paisajes urbanos futuristas recuerdan al instante a “Blade Runner”, la mítica película de ciencia ficción de Ridley Scott –inspirada en la obra de Philip K. Dick “¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?”– que fuera ambientada en una fecha que en 1982 quedaba bien lejos (el filme habla de una supuesta versión de Los Angeles en 2019).
Aquí y ahora, en Hong Kong y en 2013, cualquier parecido con la ficción no es pura coincidencia: nos rodean rascacielos vidriados con miles de luces bajo un cielo brumoso sin estrellas. Además, abundan los paraguas –para la lluvia y para el sol–, las publicidades desmesuradas que alientan a “Enjoy” (disfrutar) en mayúsculas a través de sus productos, los dragones y las serpientes en colores estridentes, el gentío con ojos rasgados y los puestos de comida al paso en calles superpobladas que ofrecen “noodles”, esos fideos finitos que come Deckard (Harrison Ford) en “Blade Runner”, con palitos chinos. Sólo faltan las naves en lo alto anunciando que “una nueva vida le espera en las colonias espaciales”, pero no importa si no aparecen. Ya no caben dudas de que en estas latitudes, el futuro llegó hace rato.
Made in China
Por Gloucester Road (a la altura de la estación de subte Wan Chai) y las calles vecinas de Causeway Bay se mezclan los olores a frito, té, incienso, pescado disecado, verduras al vapor, brisa marina. Los carteles en cantonés prometen masajes para gente estresada y otros menos inocentes, a juzgar por las fotografías de algunos avisos, así como ciertos locales de karaoke aparentan tener una clientela de dudosa vocación por el canto. Y en edificios setentosos, entre la ropa que cuelga de las ventanas de departamentos mínimos, se ven televisores donde juegan el Barça o el Milan (por la diferencia horaria, el fútbol europeo se convierte en un gran programa nocturno).
Entonces, por puro desparpajo o simple aturdimiento, uno termina esquivando más gente inesperada en callejones angostos y húmedos, respirando el calor que arrojan cientos de aires acondicionados (todos los hongkoneses tienen uno para sobrevivir a los veranos asfixiantes) y observamos la cocina –literalmente– de boliches en los que cuelgan patos laqueados. Sin saber cómo ni por qué, terminamos comiendo antes de la cena unos bollos de pescado picantes (pese a su forma y consistencia, tranquiliza saber que no son ojos de cordero) con té de pera y miel.
A pocos metros, reaparecen los shoppings, los restaurantes caros, los museos súper vanguardistas, los Rolls-Royce y Ferrari junto a las vidrieras de marcas internacionales como Prada, Louis Vuitton o Tiffany & Co, y vuelve a desplegarse la postal urbana del área financiera, como si fuera el skyline de una Manhattan china con taxis rojos.
Desde el vamos, será una empresa perdida intentar encasillar a Hong Kong: con costumbres británicas y chinas, es futurista y milenaria, espiritual y consumista, supersticiosa y racional, capitalista en un país comunista, atestada de gente que trabaja hasta catorce horas al día y que juega compulsivamente a las carreras de caballos. Intensa y contradictoria.
La ex colonia británica
Con una ubicación estratégica en Asia, la Región Administrativa Especial de Hong Kong de la República Popular China (conocida simplemente como Hong Kong), se encuentra en las orillas del Mar de la China Meridional. Su territorio es de sólo 1.104 km2 y se divide en tres áreas: la isla de Hong Kong; la península de Kowloon, unida al continente; y los Nuevos Territorios, que comprenden 262 islas entre las que se destaca Lantau.
Junto con la antigua colonia portuguesa Macao, Hong Kong es una de las dos regiones administrativas especiales de China donde se aplica el modelo administrativo “un país, dos sistemas”, ideado por el líder comunista Deng Xiaoping. Así, estos territorios mantienen un sistema económico, administrativo y judicial independientes, con libertad de expresión, aduanas y fronteras en las que se requiere de visa para entrar y salir del “Mainland” o continente.
Para entender de qué estamos hablando, será mejor remontarse antes de 1842, cuando Hong Kong era habitada por unos pocos pescadores y su puerto servía como base para el contrabando británico del opio de la India hacia China a cambio de seda, plata, té y especias. Desencadenadas las dos Guerras del Opio, la dinastía Qing cede Hong Kong al imperio británico (ver Historia); entre 1950 y 1970 recibe inmigrantes chinos con el consiguiente boom textil y desarrollo de la industria liviana; y en los 80 se convierte en uno de los centros financieros más importantes del mundo. Sin embargo, los gobiernos del Reino Unido y China firman en 1984 la Declaración Conjunta Sino-Británica sobre el futuro de Hong Kong, estableciendo que los territorios serían devueltos a China. Esto se concreta el 1° de julio de 1997, pero en los años previos, muchísimos hongkoneses emigran a Canadá y Estados Unidos por temor a los cambios.
Si el gran puerto y un parque se llaman Victoria, si existen King’s Park o Queen’s Road y Salisbury Road (entre tantas calles en inglés), si esta suerte de tranvías de dos pisos transitan por las calles con los conductores sentados a la derecha, todo eso es consecuencia de los 150 años de dominación británica en Hong Kong. Y los legados coloniales son palpables en la arquitectura de construcciones que quedaron en pie (como la Torre del Reloj, la antigua Marina, los cañones, el Observatorio, las lámparas de gas de 1865, el Time Ball Tower o Kowloon Fire Station y el camión de bomberos Dennis, por nombrar algunos vestigios). Pero también lo está en las multas severas ante transgresiones como comer o beber (hasta 2.000 dólares hongkoneses, HKD) dentro del moderno subterráneo protegido por vidrios con puertas automáticas para evitar accidentes, mientras que por fumar o escupir “esparciendo gérmenes” la pena máxima asciende a HKD 5.000.
De película y fuera de serie
Desde el piso 31 del hotel Grand Hyatt se aprecia una panorámica de película del Victoria Harbour (el puerto) con sus buques de carga, cruceros, ferrys y containers. En esta mañana con neblina, la vista de la bahía enmarcada por edificios altísimos de formas insólitas es idéntica a la apertura de la recordada serie de televisión “Hong Kong” filmada en 1960. En blanco y negro, las escenas transcurrían en plena época colonial de la mano de un periodista interpretado por Rod Taylor y el jefe de policía, Lloyd Bochner.
¿Otra forma de disfrutar de la vista? Desde 1888, un antiguo tranvía (The Peak Tram) sube por la empinada y frondosa ladera del monte Victoria y, a medida que avanza, la ilusión óptica permite que los edificios del entorno lleguen a inclinarse hasta 45 grados. Durante el ascenso –se llega a los 396 metros–, un grupo de amigas coreanas se sacan decenas de fotos con tabletas y teléfonos como recuerdo de sus primeras vacaciones en Hong Kong.
A 552 metros sobre el nivel del mar, el monte Victoria (Victoria Peak) es el más alto de la isla, por lo que se lo conoce como “The Peak” a secas. Una vez que llegamos a la terraza nos cuentan que todo comenzó en los veranos coloniales, cuando algunas familias empezaron a subir en busca de aire fresco y construyeron casas en la cima para pasar sus vacaciones. En “Sky Terrace 428” (el número alude a la altura máxima a la que se puede acceder) la vista es de 360 grados y cuenta con un curioso rincón donde la gente cuelga tarjetas en forma de corazón para expresar sus sentimientos.
En la “vereda de enfrente”, en la zona peninsular de Tsim Sha Tsui , la costanera ofrece otra perspectiva del puerto. Se trata de la Avenida de las Estrellas y está pensada para disfrutar de las vistas que ofrece la curva que va formando la bahía (tanto de día como de noche, porque la silueta de los edificios iluminados en neón cambia el paisaje por completo). Para ello, hay que partir de la Torre del Reloj y caminar junto al mar, mientras van apareciendo a nuestros pies los nombres de artistas chinos.
Experto en artes marciales, el actor Jackie Chan es una de las figuras destacadas. Pero la estrella indiscutida, fotografiada por todos y reconocida sin necesidad de leer la placa alusiva es Bruce Lee, quien hasta tiene una estatua practicando kung fu.
Si bien este es un buen punto para disfrutar de la “Sinfonía de luces” que tiene lugar todas las noches a las 20, hay un paseo en junk –juncos, típicas embarcaciones de velas rojas– que sale desde Star Ferry Pier y permite ver el show permanente más largo de luz y sonido, según Guinness, en el que participan unos 40 rascacielos de ambas márgenes del puerto. Por ejemplo, el Centro de Convenciones, el International Finance Centre (IFC), el International Commerce Centre (con 490 metros y 118 pisos, el ICC es el edificio más alto de Hong Kong) y los impactantes Bank of China y HSBC , en cuyas fachadas se dibujan figuras geométricas en blanco, rojo y verde, mientras los rayos láser de las torres principales se cruzan en el cielo.
Justamente, esta noche la cena transcurre en el piso 11 del hotel, al aire libre y junto a la piscina, pero son tan altos los edificios que nos circundan que tenemos la impresión de encontrarnos en la planta baja. ¿El cielo? Otra vez sin estrellas y con una bruma que nunca termina de esfumarse durante el día.
Los números y los dragones
Por la tarde, varias parejas hacen fila frente a Lan Fong Yuen , un local que jamás llamaría la atención de un occidental: se trata de un bar que nació como puesto callejero, con mesas redondas muy apretadas donde se sirve ¡té con leche! En un abrir y cerrar de ojos, la cola –que ya se extendía por media cuadra– desaparece. La explicación resulta tan insólita como el fanatismo por ese brebaje. Son las cuatro de la tarde y ese número es sinónimo de mala suerte porque en cantonés suena muy parecido a la palabra “muerte”. Entonces, cortan con su actividad y, unos minutos más tarde, la retoman como si nada.
Todo lo contrario ocurre con el 8, sinónimo de prosperidad y fortuna; el 9 suena como eternidad y el 3 como vida. Se llegan a pagar fortunas para conseguir una casa o una patente de auto que termine con 8. Nuestra guía hongkonesa, Sonia, recuerda que las Olimpíadas de Beijing comenzaron el 8 de agosto (mes 8) de 2008 a las 8.08 PM. Pero también aclara que “los chinitos se las ingenian: por ejemplo, si una casa termina en 74 no hay problema porque el 7 quiere decir que ‘no está bien’, entonces en ese caso, no está bien la muerte. Y un hombre de dinero, que tenía una esposa y dos hijos, para que su familia no sumara 4 se compró un Lamborghini”.
Por las dudas, el Grand Hyatt no tiene piso 13, el HSBC fue construido según los principios del Feng Shui y tiene leones protectores en la puerta, además de orientar sus espacios de acuerdo con la armonía yin-yang. Y hay un gran edificio que resalta en la zona de Repulse Bay porque enseña una curiosa abertura cuadrada en el centro. Si bien Sonia dice que ahora los rascacielos tienen estas “puertas” para que no los afecten los tifones, todo el mundo cree que por allí pasa, cada tanto, un dragón que baja de las colinas cercanas y se zambulle en el agua.
Como en Chinatown
Amanece en Kowloon y los negocios de electrónica alineados en Nathan Road abren recién a las 10 de la mañana. Como en cualquier mercado callejero, en las tiendas de Hong Kong también se regatean los precios hasta llegar a un acuerdo. Esto incluye productos tan diversos como cámaras de fotos, juegos de té de porcelana, un simple souvenir o una joya costosa. Todo se puede conversar en inglés o cantonés, y desde 1997 también en mandarín, que son los idiomas que se aprenden en las escuelas.
El sol empieza a calentar cuando ya los obreros de la construcción se encuentran trepados a altos andamios de bambú y los vendedores de las tiendas de trajes reparten tarjetas en la calle para tentar a los clientes, ante la feroz competencia. Con vehemencia, explican que si un hombre elige una tela de seda y le toman las medidas para hacerle un saco y un pantalón con líneas italianas, por ejemplo, por 1.900 dólares hongkoneses lo tendrá terminado en la mañana siguiente. Y eso también se puede arreglar por menos plata y menos tiempo.
Siempre caminando por la calle Nathan, aparece el gran parque Kowloon y, con una sincronización inexplicable, más de veinte personas mueven sus brazos y piernas con la suavidad que el tai chi chuan requiere. Detrás de unos árboles, otro grupo usa diarios a modo de colchonetas sobre el suelo y hacen de las suyas con música de fondo y todo. A pocos pasos, una mujer de unos setenta años apenas asoma sus miembros detrás de unos ligustros que forman un laberinto verde. Pero el más llamativo es el señor de pantalón y zapatos negros, camisa blanca y tiradores, cuyos movimientos pausados y respiración profunda contrastan con su atuendo formal y el maletín que dejó junto al lago (¿será el CEO de una compañía en donde le espera una jornada infernal por delante?). Todo es posible, pero unos y otros coinciden ante la mirada absorta de esta cronista y saludan con la mano o sonríen.
Persiste una sensación algo absurda que acompaña desde el primer instante en que pisamos Hong Kong, y es que en algún momento dejaremos de ver carteles en chino y gente que pasa apurada con barbijos o comiendo con palillos mientras caminan. Es decir, que cruzaremos una esquina y quedará atrás este mundo ajeno que recuerda a alguno de los “Chinatown” que hay en muchas ciudades del mundo. Pero no. Seguirán ofreciéndonos kimonos, vestidos de seda, relojes que no se sabe si serán capaces de funcionar dos días seguidos, ropa interior, monederos, carteras, mariscos disecados, leche en polvo como si fuera oro enlatado y nidos de golondrinas que se suponen nutritivos.
Una cuestión de fe
El Año Nuevo chino comenzó el 10 de febrero pasado, por lo que en las primeras semanas –y especialmente los domingos– llegan contingentes en micros desde China continental para visitar los templos, pedir y agradecer por el nuevo ciclo. Uno de los más concurridos es Won Tai Sin , reconstruido en 1969 en las laderas de Kowloon, con torres y más torres de departamentos como telón de fondo. Allí confluyen sin problemas taoístas, budistas y personas que siguen la normativa de Confucio. Todos llevan inciensos, logrando ahumar a creyentes y turistas curiosos, bajo la atenta mirada de los hombres de seguridad que previenen los accidentes con el fuego y las cenizas entre el gentío. Muchos llevan ofrendas de frutas o flores y esperan su turno para recibir un recipiente con palitos de bambú numerados que irán sacudiendo desde la entrada del templo hasta el altar. Algunos de pie, otros de rodillas, van anotando los números que van surgiendo –a veces, hacen el recorrido con la ayuda de un amigo o un pariente que va llevando la cuenta, lápiz y papel en mano– y hay “adivinadores” que harán una interpretación de la fortuna que le depara al fiel en cuestión. Además, el lugar cuenta con un centro de medicina china y una clínica herbaria que funciona desde 1924. Entre otras cosas, el taoísmo consiste en respetar y proteger a la naturaleza y ser considerado y paciente, y los creyentes le prenden al menos tres inciensos a sus deidades para expresarles su devoción. Pero quizás el secreto mejor guardado sea el jardín que se enconde detrás de las construcciones con techos en forma de pagodas.
Algunos aspectos del ritual se repiten en el templo llamado Man Mo , ciento por ciento taoísta. Apretado entre edificios y comercios, en Hollywood Road , fue construido en 1847 y es uno de los más antiguos de la isla. Allí se le rinde tributo a los dioses de la literatura (Man) y de la guerra (Mo), y en su interior también se realizan ofrendas de naranjas y manzanas, se escriben peticiones sobre cintas rosadas, rojas o verdes (las hay para el trabajo, el amor, la salud y la buena fortuna) y una enorme nube de incienso cubre el lugar cerrado y con predominio del rojo. Aquí también los sabios atienden consultas.
Bien diferente es el caso del Monasterio Budista de Po Lin situado en la cima de Ngong Ping , una montaña que se levanta en la isla de Lantau. Se puede subir a pie, pero la forma más veloz y cómoda es llegar a bordo del teleférico totalmente transparente que fue inaugurado en 2009 y recorre unos 5,7 km en 25 minutos. El paseo ofrece vistas conmovedoras de la montaña verde, del Buda a lo lejos y hasta del famoso aeropuerto diseñado por Norman Foster e inaugurado en 1998.
De esta forma, llegamos al pie de la larga escalinata que conduce hasta el Buda Gigante Tian Tan , una estatua de bronce orientada hacia el norte que alcanza los 26,4 metros por encima de un trono en forma de flor de loto y que suma 34 metros de altura si se incluye su base. Levantado en 1993 y junto al Monasterio Budista de Po Lin, el Gran Buda se encuentra sentado en la misma posición que el Buda Sakyamuni cuando alcanzó la iluminación bajo el famoso árbol de bodhi.
Hay que decir que no todo es espiritualidad en el lugar, ya que además de libros gratuitos para llevar una vida feliz y ser una buena persona, también hay tiendas de souvenirs, kioscos y hasta un Starbucks.
Los mil y un mercados
A falta de superficie, Hong Kong siempre crece hacia arriba y parece no tener techo. Como consecuencia de la superpoblación (Kowloon llegó a ser el núcleo urbano de mayor densidad del planeta, con 40.000 habitantes por km2), los departamentos tienen un promedio de 30 m2 que las familias separan con cortinas para crear ambientes distintos y el alquiler ronda los HKD 2.500 por mes. La falta de espacio en hogares asfixiantes arroja a los hongkoneses a las calles hasta tarde, por lo que es frecuente ver a la gente cenando al aire libre a las once de la noche cualquier día de la semana y recorriendo mercados a la medianoche como si siempre necesitaran comprar algo más. A eso hay que sumarle los 48.615.113 visitantes que recibió Hong Kong en 2012, logrando un incremento del 16% con respecto al año anterior.
Primero recorrimos Stanley Market , más orientado a los turistas que compran remeras y relojes de Mao y Bruce Lee, collares y pulseras con inscripciones chinas de la buena fortuna y los doce animales del horóscopo (además de la Serpiente de rigor por tratarse de su año). Por la noche fuimos al increíble Temple Street Night’s Market, donde se venden juguetes eróticos, abanicos y auriculares, junto a las carpas de los cantantes de ópera y los adivinadores del futuro que leen las manos. Todo en una sola calle.
Sin embargo, es en el distrito de Mong Kok donde están los mercados más desopilantes: el Ladies’ Market no sorprende tanto como el de Jade (más pulseras, collares y Budas, pero verdes), Flores , Peces y, especialmente, el Mercado de los Pájaros . No sólo se ofrecen aves de las especies y tamaños más variados sino jaulones de madera con bebederos de porcelana y sus alimentos (desde semillas hasta langostas y gusanos vivos). Nos comentan entonces que los pájaros son la compañía por excelencia para los ancianos y hasta no hace mucho tiempo –más precisamente, hasta el brote de gripe aviar– iban a los restaurantes con sus jaulas. La imagen resulta hilarante y casi irreal, como si se tratara de un cuento. Después de todo, Hong Kong parece salido de un gran cuento chino.

HISTORIA
Un país, dos sistemas
Podría afirmarse que la isla de Hong Kong, tal como se la conoce hoy, nació en 1842, cuando esta antigua morada de pescadores absorbida por China hacia el 50 aC. fue cedida al Reino Unido. El traspaso a manos inglesas ocurrió tras la derrota china en las Guerras del Opio (de 1839 a 1842 y de 1856 a 1860, respectivamente), que enfrentaron a ambas potencias a causa de un fuerte conflicto comercial.
Bajo el ala del Reino Unido, Hong Kong se erigió como centro del comercio internacional. Las oleadas de inmigrantes en el siglo XX (mayormente desde China) ubicaron a la isla como polo industrial, lo que derivó en su posicionamiento, en los 80, como una de las diez economías más relevantes del mundo. Hoy es uno de los primeros centros financieros de Asia.
En 1984, China y Gran Bretaña firmaron el tratado “Sino-British Joint Declaration”, en el que se estableció la vuelta de Hong Kong, desde 1997, a la tutela china, con el nombre oficial de Región Administrativa Especial de Hong Kong de la República Popular China. El sistema económico definido allí es el de “un país, dos sistemas”, es decir, el mantenimiento de su economía capitalista bajo la soberanía de un país comunista, situación que seguirá –dice el tratado– hasta 2047.
Una de las claves para comprender la peculiar configuración actual de Hong Kong es el siguiente contrapunto: haber logrado, por un lado, conservar buena parte de su vida tradicional antigua (sin las influencias que el maoísmo ejerció en China continental) y, a la vez, por su historia como colonia británica, haber incorporado, al menos en parte, usos y costumbres propios de Occidente.

LA BUENA MESA
Los Dim Sum
Cocinados al vapor y servidos en canastas de bambú desmontables, los Dim Sum son el plato más típico de Hong Kong. Se trata de unos pequeños bollos o snacks de pasta, rellenos con carne, pollo, hongos, camarones, pescados o verduras, que se sirven tanto en el desayuno como en la cena. Por supuesto, como ocurre con toda la comida china que se precie de tal, se comen con los clásicos palillos. 
Los restaurantes cuentan con las clásicas mesas redondas con vidrios giratorios en el centro, por lo que los comensales disponen de dos juegos de palillos: con el primero se sirven de los platos comunes y con el segundo se llevan su propia comida a la boca. A toda hora, la comida es acompañada con té. También se consume sopa de aleta de tiburón y nidos de golondrina, así como noodles (fideos) y rolls fritos con verduras, pescados o cerdo. A su vez, el arroz con hongos y carnes es un plato predilecto en esta región, así como el famoso pato laqueado, que se sirve en trozos.

IMPERDIBLES
Aldeas, playas, parques y museos
Tai O. Se trata de una auténtica aldea de pescadores ubicada en la isla de Lantau, donde la comunidad Tanka construyó sus casas sobre pilotes. Viven allí desde hace varias generaciones. Tiene un colorido mercado al aire libre que ofrece peces y mariscos vivos (se exhiben en recipientes con agua) o pescados disecados.
Nan Lian Garden. En Diamond Hill, Kowloon, este jardín fue inaugurado en 2006 y su diseño se basó en el jardín Jiangshouju de la dinastía Tang, un paisaje tradicional chino de la provincia Shanxi. Cuenta con un Pabellón dorado en el centro del Estanque de Loto y las edificaciones llamadas Song Cha Xie y Xiang Hai Xuan, además de un molino de agua y una cascada que cae  al frente de un restaurante vegetariano.
LockCha. Una casa de té para degustar y aprender la historia de una ceremonia tradicional y saludable. Está junto al interesante Flagstaff House Museum of Tea Ware.
Clases de Tai Chi y de Feng Shui. Con el objetivo de balancear el yin y el yang y lograr la armonía entre cuerpo, mente y alma, Willian Ng y Pandora Wu enseñan Tai Chi desde hace años. En tanto, la ancestral práctica que remite al “viento y agua” para atraer la buena fortuna está a cargo de Alex Yu y Shirly Chan.
Ocean Park. Entre sus numerosas atracciones se destacan los osos pandas gigantes en peligro de extinción y un gran acuario.
Repulse Bay. Las aguas están demarcadas con flotadores amarillos que advierten que allí hay redes para que no pasen los tiburones, pero en la costa sur las playas son convocantes para descansar.
Disneyland Hong Kong. Toda la magia de Disney, con el ratón Mickey y sus amigos, se puede experimentar al visitar este parque temático.
Museo del Espacio. Tiene dos salas (ciencia espacial y astronomía), actividades interactivas y planetario con sistema IMAX.
Lamma. Hong Kong también tiene colinas y selvas subtropicales, así como playas de arena blanca y un ritmo tranquilo en las islas vecinas. Lamma es una isla de pescadores con casas sobre pilotes y sin autos, donde se puede comer mariscos frescos.
Museo de Arte. En Kowloon, tiene más de 15.000 piezas antiguas y colecciones modernas.

MINIGUIA

MONEDA. La moneda oficial es el dólar de Hong Kong: 1 dólar estadounidense es equivalente a 7,76 dólares hongkoneses. A su vez, 1 peso argentino equivale a 1,53 dólares hongkoneses.
VISA. Los argentinos no necesitan visa para entrar en Hong Kong.
CLIMA. Si bien el mejor momento para viajar es el otoño (de septiembre a noviembre), con brisas y temperaturas medias óptimas, el resto del año no suele ser demasiado adverso: la primavera, de marzo a mayo, tiene días cálidos y algo húmedos; en verano –junio a agosto– hace calor, hay bastante humedad y puede haber algunas tormentas (con temperaturas que pueden pasar los 30 grados); y el invierno es seco y nublado, pero la temperatura durante el día suele rondar los 15 grados centígrados.
ATENCION. Hay 11 horas de diferencia respecto de la Argentina, por lo que conviene prever, en el momento de programar el itinerario, los efectos que dejará el jet lag.

INFORMACION
Turismo de Hong Kong: www.discoverhongkong.com/es
www.tourism.gov.hk

ARGENTINA: NOROESTE; entre valles y chacareras

Noroeste, entre valles y chacareras
Desde la Quebrada de Humahuaca hasta los Valles Calchaquíes y las Yungas, esta región ofrece un increíble abanico de culturas, sabores y paisajes.
Del 11 al 16 de enero, la Puna y los valles del Noroeste argentino volverán a rugir bajo el paso del rally Dakar, que en la región recorrerá las provincias de Jujuy, Salta –con un vivac en Cachi y otro en la capital–, Tucumán –donde tendrá su día de descanso–, Santiago del Estero, Catamarca y La Rioja.
Pero este será sólo uno de los tantos eventos que cada verano convocan en esta mágica zona del país. La Serenata a Cafayate, el Enero Tilcareño, los célebres y coloridos carnavales o las festividades de la Virgen de la Candelaria en Catamarca son otros imperdibles .
En todo caso, son más razones o excusas para visitar una zona rica en diversidad, que continúa trabajando y presentando nuevos productos, ofertas, recorridos. Como la provincia de Salta, que acaba de presentar un manual con nada menos que 111 circuitos sugeridos, desde los más clásicos hasta otros novedosos.
También Tucumán y Santiago del Estero crecen. En Tucumán, en los últimos cinco años inauguraron 26 nuevos hoteles, incluyendo un Hilton. Con las próximas aperturas de Sheraton y Howard Johnson en la capital, la provincia llegará a 10 mil plazas. También las Termas de Río Hondo presentan remodelaciones y aperturas de nuevos hoteles, que actualizan los baños termales más tradicionales del país. Aquí, los principales destinos de la región.
Salta capital
Salta
La más colonial de las ciudades del NOA suele ser una base para recorrer toda la zona. Pero merece unos días para disfrutar sus encantos, como la plaza 9 de Julio, rodeada por la catedral, el Cabildo con su museo histórico y el Museo de Arqueología de Alta Montaña (MAAM), con sus momias andinas. Pero Salta también es el Tren a las Nubes, el cerro San Bernardo y su teleférico, la basílica de San Francisco, las famosas peñas de la calle Balcarce o las localidades cercanas, como San Lorenzo, Cerrillos o Campo Quijano. Tren a las Nubes más Movi Track (regresando en camioneta 4x4), $ 885 por persona; promo Tren más vuelta en bus, $ 830. Habitación doble en Sheraton Salta, desde US$ 155.
www.turismosalta.gov.ar.
Valles Calchaquíes
Salta
Es el gran clásico del NOA, y aunque abarca también partes de Tucumán y Catamarca, su corazón está en Salta, especialmente el tramo de la ruta 40 (160 km) que va de Cachi a Cafayate, pasando por Seclantás y sus famosos tejidos; Molinos, con su antigua iglesia y la cercana Colomé; Angastaco y la impactante Quebrada de las Flechas. Paralela a esta vía, la ruta 68 une Salta y Cafayate a través de la Quebrada de las Conchas, de impresionantes colores y formaciones naturales. Sitios arqueológicos, tradiciones, cerros de mil colores, aventura y bodegas. Cafayate, el corazón de los Valles, ofrece actividades para todos los gustos, incluido su moderno Museo de la Vid y el Vino, y a fin de febrero se festeja la Serenata a Cafayate. Habitación doble en hotel y wine spa Patios de Cafayate, desde US$ 265; en Hostería ACA de Cachi, desde $ 551. Excursión Vuelta a los Valles desde Cafayate (dos días y una noche), $ 600.
www.turismosalta.gov.ar.
Norte Verde y Yungas
Salta/Jujuy
La zona selvática del NOA es quizás una de las menos conocidas turísticamente, pero vale la pena. El “Norte Verde” promociona Salta a esta región, con cabecera en Tartagal, Orán y Gral. Mosconi, y nueva infraestructura. Junto a las yungas jujeñas, conforma la Reserva de la Biosfera de Yungas, protegida por la Unesco, zona ideal para ecoturismo, trekking, mountain bike, pesca, safaris fotográficos y avistaje de aves. Comunidades de pueblos originarios, como wichís, chiriguanos, chané y tobas, abren sus puertas a los visitantes. En el norte de Salta, Baritú es el único parque nacional tropical de la Argentina, y el menos visitado (se accede desde Bolivia, el ingreso es gratuito y hay alojamiento y actividades en la localidad de Los Toldos). Aerolíneas i/vuelta a S.S. de Jujuy, desde $ 1.351. En establecimiento Tata Balta, camino a Ocloyas (Jujuy), cabañas para 4, $ 400. Día de campo, $ 110 (desayuno, almuerzo, actividades rurales).
www.turismosalta.gov.ar www.turismo.jujuy.gov.ar
Humahuaca
Jujuy
Los colores de sus cerros, la cercanía del cielo, la belleza de sus pueblos, su historia. La Quebrada de Humahuaca, declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, es una joya del NOA, un valle de 160 km de largo ubicado a más de 2.000 msnm, rodeado de montañas y surcado por el río Grande y la ruta 9. Sus cabeceras son Purmamarca, Tilcara y Humahuaca, pero otro ramillete de pueblos, como Maimará, Huacalera u Hornaditas, merecen una buena visita. Desde Purmamarca se accede al espectáculo de las Salinas Grandes y la Puna, y las calles empedradas de Humahuaca señalan el camino a Iruya (Salta), una perla colgada de los cerros. Empanadas, tamales e historia están por todos lados –el Pucará de Tilcara, la Posta de Hornillos, Uquía y su iglesia con pinturas de la Escuela Cusqueña–. En verano estalla la fiesta del Enero Tilcareño, y en febrero los coloridos carnavales. Hay hoteles de alta gama, como El Manantial del Silencio en Tilcara (dobles, desde US$ 221), hasta hostels, casas de familia, dormis ($ 45 por persona, con desayuno) y campings. En agencia Ser Andino, un día por la Quebrada clásica, desde $ 140 (sin almuerzo); excursión a Iruya, $ 260.
www.turismo.jujuy.gov.ar
Tafí del Valle
Tucumán
Se dice que este valle de altura, cuyo nombre proviene de la voz diaguita Taktillakta, que significa “de la entrada espléndida”, estuvo poblado hace ya 2.300 años. Luego llegaron pueblos de valles vecinos, más tarde los españoles, y a comienzos del siglo XVIII las tierras pasaron a manos de los jesuitas. Laderas siempre verdes, el embalse El Mollar, los menhires, testigos de aquellos antiguos años, y numerosas actividades, entre las que destacan las cabalgatas. Habitación doble en estancia Los Cuartos, $ 320; almuerzo criollo y visita guiada, $ 80. Jerónimo Critto ofrece cabalgatas de 2,5 hs a $ 160 por persona, con refrigerio; de todo el día (10 a 16), $ 345 (incluye quesos, asado con bebidas y postre); o a la luz de la luna llena. Almuerzo en restaurante de campo El Puesto, $ 55.
www.tucumanturismo.gov.ar
Circuito Chico
Tucumán
Saliendo de San Miguel de Tucumán por la avenida Mate de Luna se llega a Yerba Buena, localidad –casi un barrio aledaño– que alguien definió como “el Palermo tucumano” por sus bares y restaurantes gourmet. De allí al oeste, un circuito de curvas y contracurvas asciende por las sierras de San Javier. En pocos km se asciende de los 400 a 900 msnm, y el verde se adueña del recorrido. Pueblos como San Javier, Villa Nougués, San Pablo, Raco o El Siambón; Loma Bola, para volar en parapente (vuelo de bautismo, $ 350), el monasterio de Cristo Rey, donde se elaboran dulces, conservas y otras delicias caseras, y el dique El Cadillal, que en los últimos tiempos sumó numerosas actividades: lanchas, kayaks, esqui acuático, gomones, banano, palestra, tirolesa, trekking, mountain bike, y una aerosilla que acaba de ser inaugurada. Hab. doble en hotel Sol San Javier, $ 660, con desayuno, spa y actividades recreativas. Promo 3x2 de domingo a miércoles.
www.tucumanturismo.gov.ar
Fiambalá
Catamarca
Vinos y bodegas, termas, antiguas capillas en la Ruta del Adobe, inabarcables cumbres andinas y un valle siempre verde. Fiambalá y la cercana Tinogasta son dos perlas en los Andes catamarqueños, que dan acceso a la Puna más despojada y espectacular: los Seismiles –grupo de volcanes de más de 6.000 metros de altura– o el Campo de Piedra Pómez, entre otras formaciones. Cuatro centros termales –La Aguadita, Fiambalá, Laguna Verde y La Gruta–, el Circuito de los colores camino al paso San Francisco, travesías de trekking y a caballo, andinismo, la Ruta del Vino, ruinas prehispánicas y la Ruta del Adobe, unos 55 km por antiguos pueblos construidos en barro. Excursión de Chaku Aventura a los Seismiles, Ruta del Adobe y termas, $ 1.650 p/persona base doble (incluye alojamiento). Cabaña completa para dos personas en Cabañas Tunay, $ 450 por día. Dormis p/2 con baño privado (sin desayuno), $ 250.
www.fiambala.gov.ar
Termas de Río Hondo
Santiago del Estero
La reciente apertura del hotel y casino Carlos V, de la cadena Amerian, no hace más que confirmar el crecimiento y renovación de este destino clásico del NOA. Las termas más tradicionales del país, a 65 km de la capital santiagueña, cuentan con más de 170 alojamientos de todas las categorías. Las bondades de sus aguas aseguran efectos revitalizantes y curativos. Imperdible combinar este viaje con el Festival de la Chacarera 2013, del 11 al 13 de enero en el Barrio Los Lagos de La Banda. El 2 de febrero, el Festival de La Salamanca. Habitación doble en Amerian Carlos V, desde $ 900; en hotel Los Pinos, $ 765 por persona, all inclusive. Paquete 7 noches, desde $ 5.350. www.turismosantiago.gov.ar
Talampaya
La Rioja
Un nuevo circuito recrea la fauna y la flora que existía en el Triásico en el sitio en que hoy está el Parque Nacional Talampaya. En 230 metros, cuenta con sala de proyecciones y una exhibición cronológica, a escala natural, de los dinosaurios que habitaban la zona. Los restos fósiles hallados son una riqueza del Parque, que se hizo famoso en el mundo por sus impresionantes paredones y cañadones rojizos. Además, en su ambiente desértico, aloja una naturaleza sorprendente: jarillas, cactus, retamos y algarrobos comparten con zorros de monte, guanacos, maras, tortugas, lagartijas y cóndores, que se pueden ver planeando sobre los cañadones. En 215 mil ha, el Parque ofrece sitios como el Jardín Botánico, la Ciudad Perdida e impactantes geoformas creadas por la erosión. Bus cama a La Rioja (ida), $ 560. Ingreso al parque, $ 20. Hab. doble en hotel 4 estrellas Pircas Negras (Villa Unión), $ 400.
www.talampaya.gov.ar

NOTA: 100 escapadas de verano


100 escapadas de verano

Un completo informe con opciones de recreación y descanso, sin alejarse mucho de la ciudad. Estancias, destinos clásicos, pesca, salidas con los chicos, aventura, hoteles de lujo, termas y spa para elegir

La creciente popularidad del turismo rural y las escapadas a destinos cercanos –cuyos paisajes rurales de la llanura pampeana se combinan con sierras, ríos y lagunas– mantiene su vigencia durante el receso del verano. Más allá del calendario de fines de semana largos, las salidas cortas resurgen como una opción válida para disfrutar de las vacaciones.

La Secretaría de Turismo de la Provincia de Buenos Aires sugiere recorrer el circuito “Los caminos de Evita y Perón”, pasear por La Plata en el Bus Turístico gratuito (tiene cuatro salidas desde la Catedral los fines de semana y feriados a la tarde) y planificar distintas escapadas desde la ciudad de Buenos Aires, Mar del Plata y Bahía Blanca. Otra fascinante experiencia es adentrarse en la gastronomía, las festividades y rincones de interés de los doce Pueblos Turísticos bonaerenses (Carlos Keen, Villa Ruiz, Gouin, Azcuénaga, Uribelarrea, Villa Logüercio, Santa María, Saldungaray, Villa Lía, Escalada, Mechongué y San Agustín).

ESTANCIAS

1 Finca María Cristina (Brandsen)
Las chacras boutique de esta estancia, con parrilla y cocina, se levantan en un parque, en el que resaltan los eucaliptos. Ofrece paseos a caballo y en sulky, fútbol, vóley, juegos de mesa e infantiles. Casa para cuatro personas con pensión completa, wi-fi, DirecTV y actividades Reservas: 4976-6010 / (155) 0539682 / (02223) 15505425 /
reservas@fincamariacristina.gov.ar / www.fincamariacristina.com.ar

2 Villa María (Maximo Paz)
 Un detalle saliente de esta lujosa finca es el parque de 600 ha, diseñado por Carlos Thays. Cabalgatas, carruaje, bicicleta, billar y juegos de mesa. Habitación doble, pensión completa y actividades, ; suite con DirecTV, . Reservas: 4815-0989 /
info@estanciavillamaria.com / www.estanciavillamaria.com

3 La Dorreguita (Pipinas)
 El lugar indicado para relajarse, en un confortable ambiente rural y con excelente atención personalizada. Son imperdibles los paseos en bote con merienda en la bahía Samborombón. Además, avistajes de aves, observación de estrellas con telescopio e hidromasaje. Habitación doble, pensión completa, wi-fi, dvd, DirecTV, pileta, pesca y paseo en bote, US$ 400. Reservas: (155) 9775531 /
contacto@ladorreguita.com / www.ladorreguita.com

4 La Isolina (Olavarría)
 La exquisita gastronomía se basa en antiguas recetas familiares. Se organizan cabalgatas para distintos niveles. El asado se sirve en un rancho de 1884. Un día y una noche por persona con copa de bienvenida, pensión completa, bebidas, cabalgata, pesca, canoa, pileta, bochas, carruaje, bicicleta y cancha de tenis de césped, . Reservas: 4806-1404 / (02284) 15652616/15477043 /
laisolina@hotmail.com / www.laisolina.com

5 La Herradura (Los Cardales)
 Una propuesta sencilla en un ambiente familiar, que alcanza su máxima expresión durante el show folclórico que anima el almuerzo. El programa de día de campo se completa con una cancha de bochas, juegos inflables y clases de gimnasia y relajación. Desayuno, almuerzo, bebidas, merienda, carrera de sortija, show folclórico, caballos, bochas, tejo y sapo, . Reservas: 4468-1390 / (153) 44177 36 / (02322) 492-142 /
informes@campolaherradura.com.ar / www.campolaherradura.com.ar

6 La Candelaria (Lobos)
 Brinda la posibilidad de alojarse en su casco colonial o en un imponente castillo francés construido en el siglo XIX. Los martes y los sábados se realiza una fiesta folclórica con danzas nativas y destreza gaucha. También se puede disfrutar de la pileta, cabalgar, pasear en sulky y en bicicleta, jugar al tenis, fútbol, pool y ping pong. Dos días y una noche con pensión completa y bebidas sin alcohol,  Reservas: (02227) 494-132/473
info@estanciacandelaria.com / www.estanciacandelaria.com

7 Loma Verde (Brandsen)
 Esta casa de campo y granja ofrece una auténtica propuesta campestre, muy didáctica y entretenida, para compartir en familia. La jornada transcurre entre talleres, juegos (como carrera de embolsados y taba), tareas rurales (corte de troncos y alimentación de animales, entre otros), paseo en sulky y exquisita comida; 2 días y 1 noche con media pensión, Reservas: (02223) 442-209/937 /
granja@granjalomaverde.com.ar / www.granjalomaverde.com.ar

8 La Porteña (San Antonio de Areco)
 El casco de 1822 conjuga historia, tradición y diseño. El escritor Ricardo Güiraldes visitaba seguido la estancia. El alojamiento en la Casa Grande ofrece cómodas instalaciones y el atractivo de la ambientación, basada en la literatura del autor de “Don Segundo Sombra”. Un día y una noche con pensión completa, pileta, wi-fi, guitarreada y actividades,Recepción, almuerzo y merienda,. Reservas: (155) 6267347 /
laporteniadeareco@gmail.com / www.laporteniadeareco.com

9 El Varadero (Baradero)
 Seis cabañas confortables, ideales para descansar en medio del bucólico paisaje de la Reserva Histórica y Ecológica Colonia Suiza, a 5 km del centro de Baradero. También se hacen cabalgatas. Cabaña para 4 (7 d./6 n.) con desayuno, piscina, wi-fi, reposeras, sombrillas y juegos para chicos, . Reservas: (03329) 15691742 /
info@elvaradero.com / www.elvaradero.com

10 La San Antonio (Guernica)
 Lo mejor es el asado, en un ámbito sencillo y familiar, que es matizado por gatos, zambas y chacareras interpretadas por un cantante. Se hacen paseos a caballo y en sulky, recorridos fotográficos por la granja y se puede jugar al paddle, fútbol, vóley, bochas, tejo, pool, metegol, sapo y ping pong; 2 d./1 n. en bungalow con pensión completa, DirecTV y actividades. Reservas: (156) 9936364 /
info@lasanantonio.com.ar / www.lasanantonio.com.ar

11 El Gateado (Tomas Jofré)
 El día de campo, muy completo, se extiende hasta el atardecer. Sabrosa comida casera, reposeras bajo los árboles y actividades. Se recomienda un paseo por el pueblo rural. Reservas: (153) 0848206 / (02324) 428-484
reservas@estanciaelgateado.com.ar / www.estanciaelgateado.com.ar

12 La Estrella (Balcarce)
 Una finca lujosa, a mitad de camino de Balcarce a Tandil, en un sugerente paisaje de sierras y llanura. Además de prestarse para el descanso, el lugar es ideal para realizar una cabalgata y practicar trekking. Otra atracción de esta estancia es el spa. Suite doble De Lujo con pensión completa, piscina y actividades,  Reservas: (02266) 430-485 /
reservas@estancialaestrella.com / www.estancialaestrella.com

13 La Alvariza (Chascomús)
 Auténtica tradición gaucha alrededor de una finca centenaria, cerca de la laguna de Chascomús. Platos muy bien preparados, actividades de campo, cabalgatas, juegos y bicicletas para chicos. Entradas, asado con bebida y postre, merienda, pileta y actividades, 3 a 12 años, 50%Reservas: (154) 0525417 / (02241) 426-008 /
info@laalvariza.com.ar / www.laalvariza.com.ar

14 Santa Ana (Coronel Suárez)
 Alrededor del casco –una centenaria casona de estilo anglosajón– se desarrolla actividad agrícola y ganadera. Puede ser una cómoda base para hacer un circuito por Pigüé,  , el lago Epecuén y la ciudad termal Carhué; 1 d./1 n. por persona con pensión completa, bebidas, caballo, pesca, DirecTV, wi-fi, cuatriciclo, pileta y tareas rurales,  3 a 12 años, 50%. Hay descuentos para grupos y por estadías de más de 7 días. Reservas: (155) 1041963 / (02926) 15453055/6 /
info@estanciasantaana.com.ar / www.estanciasantaana.com.ar

15 La Margarita (Tapalqué)
 Esta elegante casona de 1870 es ideal para dedicarse a la lectura en la biblioteca, pasear en bicicleta, jugar al golf y al tenis, organizar una cabalgata y observar aves. La estadía incluye pensión completa, con gaseosas y una botella de vino cada dos personas por comida; 3 días y 2 noches por persona, cabalgata, piscina, bicicleta y juegos de salón,  Reservas: 4951-0638/4515 /
info@estancialamargarita.com / www.estancialamargarita.com

16 Los Ombúes (Villars)
 Se distingue por la gastronomía y la variedad de juegos y actividades para compartir en familia. La arboleda del cuidado parque induce a hacer una siesta después del asado. Los huéspedes cuentan con bicicletas, canchas de tenis de polvo de ladrillo, fútbol, vóley, reposeras, bicicletas, metegol, ping pong y 9 hoyos de golf; dos días y una noche con pensión completa, piscina y actividades, Res.: 4643-1978 / (156) 3971978 /
info@losombueseventos.com.ar / www.losombueseventos.com.ar

17 Pampas del Sur (Cañuelas)
 En medio de una añosa arboleda, combina sesiones de reiki y masoterapia con cabalgatas, paseos a caballo, en bicicleta y en carruaje. El Club House es el lugar más indicado para estirar la sobremesa, charlar y leer. Verduras frescas acompañan el asado. Dos días y una noche por persona con pensión completa, bebidas sin alcohol, wi-fi, caballo y piscina; con un masaje, . Reservas: 5235-8545 / (156) 3812210 /
reservas@pampasdelsur.com / www.pampasdelsur.com

18 Cabaña La Tarde (Tomás Jofré)
 Servicios de primer nivel, en un lugar preparado para brindar descanso y jugar al polo. Los expertos pueden taquear y los principiantes tomar una clase. Juegos infantiles, canchas de bochas y fútbol. Son imperdibles el salame casero y la leche recién ordeñada. Cabaña para dos personas con desayuno, pileta, Club House y wi-fi,. Reservas: 4798-9231 / (154) 9864527 /
consultas@latardepolo.com.ar / www.latardepolo.com

19 El Rancho Grande (Parada Robles)
 Un chalé de estilo alpino y la comida casera se destacan en esta hostería de campo, ubicada en el km 78 de la ruta 8 (Panamericana ramal Pilar). Cuenta con arboleda, parrillas, cancha de paddle, pileta y un restaurante a la carta, cuyas especialidades son las pastas caseras y carnes al horno; 2 días y 2 noches, la habitación doble con pileta, hidromasaje, reposera, TV cable, aire acondicionado y wi-fi. Reservas: (02323) 478-100 /
gonzaloponti@yahoo.com.ar / www.elranchograndeweb.com.ar

20 Santa Elena (Las Heras)
 Tradiciones pampeanas, tejo, bochas, fútbol y vóley, en un amplio parque arbolado. Lo mejor pasa por el asado –que se sirve en la galería exterior del sector antiguo– y la amable atención de “Pinocho” Viale y su hijo; 2 d./1 n. con pensión completa, pileta, paseos a caballo y en carruaje de 1890, wi-fi y DirecTV, ; hasta 9 años, 70%; día de campo,. Reservas: (02227) 15610558 /
estanciasantaelena@yahoo.com.ar / www.estanciasantaelena.com


DESTINOS CLASICOS

21 Chascomús
 Es buena época para disfrutar de la laguna de Chascomús, rodeada de recreos, cabañas y campings. Además de degustar las populares medialunas de Atalaya (junto a la ruta 2), se puede visitar el Teatro Brazzola, la Casa Casco, una centenaria capilla con piso de tierra y el café y centro cultural La Botica, en una construcción de 1852. Informes: (02241) 42-2697 /
turismochascomus@yahoo.com.ar / www.chascomus.gov.ar

22 Tandil
 El circuito clásico vincula la Reserva Sierra del Tigre –donde se accede a la cima del cerro El Venado– con el cerro El Centinela (tiene una aerosilla), Monte Calvario y su Vía Crucis, la Piedra Movediza que cayó en 1912 y el cerro Castillo Morisco. A no perderse una picada en el almacén y casa histórica Epoca de Quesos. El 5 y el 6/1 se realizará la travesía “Cruce Tandilia, reto al precámbrico”. El formato competitivo demanda correr 42 km. Los principiantes pueden sumarse a la opción recreativa y hacer 21 km de trekking. Inscripción, $ 650 (
www.crucetandilia.com.ar). Informes: (0249) 443-2073/225 / turismo@tandil.gov.ar / www.turismo.tandil.gov.ar

23 Lincoln
 Es un deleite la fiesta de Carnaval que se celebra en esta ciudad del noroeste bonaerense, ya que desfilan las gigantescas figuras de gestos grotescos de los “cabezudos”, fruto de una tradición artesanal transmitida por generaciones. Previamente se pueden visitar los talleres de los artesanos, que también ponen a punto carrozas, minicarrozas y máscaras. Lincoln también cuenta con el refrescante Parque Municipal San Martín y el Museo Histórico. Informes: (02355) 422-001 /
contacto@gestionfernandez.com / www.lincoln.gob.ar

24 Isla Martín García
 Enclavada en el Río de la Plata y habitada por más de 200 especies de pájaros, la isla genera un muy didáctico recorrido a pie por sitios históricos y distintos ambientes naturales, como juncales, selva y bosque. Una panadería de 1813 es famosa por su pan dulce. Desde Tigre llegan los barcos Cacciola. Informes: (0221) 429-5555 /
subsecretaria@turismo.gba.gov.ar / www.islamartingarcia.info

25 Tigre
 En los últimos años, la propuesta de los recreos, restaurantes, cabañas y hosterías del Delta se diversificó y mejoró notoriamente en calidad. En tierra firme, el Bus Turístico vincula el Mercado de Frutos con el Paseo Victorica, el Parque de la Costa y el Circuito de Museos, como el lujoso Museo de Arte y el Museo Naval. Informes: 0800-88884473/ 
turismo@tigre.gov.ar / www.vivitigre.gov.ar

26 Sierra de la Ventana
 El cerro Ventana es la gran atracción de esta comarca serrana. Se accede después de un exigente trekking en ascenso. Villa Ventana, Sierra de la Ventana, La Gruta y Villa Arcadia cuentan con buenos hoteles, cabañas y restaurantes. En Saldungaray se hacen visitas guiadas a una bodega artesanal y a un fortín reconstruido. Informes: (0291) 491-5303 /
dttornquist@yahoo.com.ar / www.sierrasdelaventana.tur.ar

27 Gualeguaychú
 En este destino del sur de Entre Ríos, los lugares indicados para disfrutar del contacto con la naturaleza son el parque Unzué, el río Gualeguaychú y el camping y balneario Ñandubaysal, con playa de arena sobre la costa del río Uruguay y un bar construido por el artista uruguayo Carlos Páez Vilaró. Se organizan excursiones embarcadas y salidas de pesca con guía. Son imperdibles los alfajores y helados Bahillo. Informes: (03446) 42-2900 /
informacion@gualeguaychuturismo.com / www.gualeguaychuturismo.com

28 San Antonio de Areco
 El Circuito de los Artesanos Arequeros (plateros, pintores, sogueros, tejedores, ceramistas y chocolateros) permite conocer algunos secretos del más renombrado pago de tradición gauchesca. A su vez, el Parque Criollo y Museo Ricardo Güiraldes propone otro paseo didáctico. Informes: (02326) 45-3165
turismo@areco.gob.ar www.sanantoniodeareco.tur.ar 29 Luján Ofrece cuatro circuitos temáticos. El más popular es el recorrido “Religioso”. El Circuito Histórico incluye el Museo Historiográfico y el Museo de la Algodonera, en Flandria. El Circuito Rural abarca restaurantes de campo, estancias y centros tradicionalistas. En la propuesta “Natural” se destaca el Parque Ameghino. Informes: (02323) 427-082 / turismo@lujan.gov.ar / www.lujan.tur.ar

30 San Pedro
 La gran novedad es un recorrido por antiguos túneles industriales. También es poco conocida la propuesta de turismo rural en Santa Lucía, a 37 kilómetros de San Pedro por la ruta 191. Magníficas vistas del río Paraná se obtienen desde las barrancas de la ciudad y en Vuelta Obligado, 19 km al norte, que acaba de ser incorporado al listado de “Pueblos Históricos” del gobierno bonaerense. Para no perderse, la exquisita ensaimada mallorquina y el parque de esculturas El Sueño del Tano. Informes: (03329) 42-8483/9406 /
turismo@sanpedro.gov.ar / www.sanpedro.gov.ar

31 Mercedes
 Se mantienen en pie antiguas tradiciones de campo, pulperías y bares de tragos. Un circuito guiado propone combinar un entretenido relato histórico con una buena picada. La mejor gastronomía criolla –encabezada por el asado y el salame quintero– se ofrece en Tomás Jofré, a 10 kilómetros. Informes: 0810-3330997 /
turismo@mercedes.gob.ar / www.mercedes.gob.ar

32 La Plata
 La Catedral, el mayor templo neogótico de Sudamérica, lidera un circuito arquitectónico. El Bosque cobija el Museo de Ciencias Naturales y el Zoólógico. La propuesta cultural de los vecinos del barrio Meridiano V es animada por talleres y espectáculos gratuitos en la Estación Provincial. Informes: (0221) 427-1535 /
ematur@laplata.gov.ar / www.laplata.gov.ar

33 Rosario
 La ciudad del sur de Santa Fe luce muy mejorada y sugiere bastante más que un paseo por la recuperada Costanera y el Monumento a la Bandera. Creció la oferta cultural gratuita y se realizan paseos embarcados por el Paraná hasta islas cercanas. Otros lugares muy interesantes para recorrer son el Circuito Histórico –incluye el señorial Boulevard Oroño– y el Parque Independencia. Informes: (0341) 480-2230/1
info@rosarioturismo.com / www.rosarioturismo.com

34 Villa Carlos Paz
 Completa infraestructura hotelera y de entretenimiento en esta ciudad cordobesa. Cuenta con recreos y campings muy familiares a orillas del lago San Roque. Carlos Paz es una cómoda base para recorrer otras localidades del Valle de Punilla, como Cosquín, La Falda, La Cumbre, Valle Hermoso, Huerta Grande y Capilla del Monte. Informes: (03541) 421-624 /
secretariadeturismo@villacarlos paz.gov.ar / www.villacarlospaz.gov.ar

35 Balcarce
 En la tierra natal de Juan Manuel Fangio, lo mejor está en los senderos que trepan la ladera de la sierra La Barrosa, el ambiente relajado de la laguna La Brava (con cabañas, campings, pesca y deportes náuticos), el Museo del Automovilismo y un tradicional postre –rebautizado “Comoantes”–, de fama internacional. Informes: (02266) 42-5758 /
turismo@balcarce.mun.gba.gov.ar / www.balcarce.gob.ar

36 Parque Luro
 A 25 kilómetros al sur de Santa Rosa por la ruta 35, la mayor parte de sus 8 mil hectáreas está cubierta por bosques de caldén, el árbol más representativo de La Pampa. Un sendero permite llegar hasta una laguna, donde se ven flamencos, parte de las 160 especies de aves que pueblan la zona. Cerca de un castillo suelen observarse jabalíes, pumas, zorros y ciervos colorados. En marzo y abril –época de reproducción– se hacen avistajes de ciervos en brama. Informes: (02954) 42-4404/5060 /
infoturismo@lapampa.gov.ar / www.turismolapampa.gov.ar

37 Colón
 Si bien el Parque Nacional El Palmar es el destino más buscado por los visitantes de esta ciudad del litoral entrerriano, cerca de aquí también atraen el Palacio San José, la pesca, el tren a vapor y las termas de Villa Elisa, el histórico Molino Forclaz (en San José) y el antiguo pueblo-factoría Liebig. Colón tiene playas de arena, un complejo termal y espectaculares vistas del río Uruguay desde los miradores del Parque Quirós. Entrada al Palmar, $ 20; hasta 16 años y mayores de 65, gratis; universitarios, $ 10; paseo de una hora por el río Uruguay en lancha Donato, $ 50; de 3 hs. 30’, $ 120; 3 a 11 años, $ 30 y $ 60. Informes: (03447) 42-3000/1233
turismo@colon.gov.ar www.colon.gov.ar

38 Campana
 Para los amantes de las caminatas, lo mejor es recorrer el Barrio Inglés y terminar la tarde con una merienda en la panadería Sol de Mayo, donde se elabora torta de nuez pecán. El circuito histórico une la plaza Costa con la Catedral Santa Florentina, el Palacio Municipal, los museos del Automóvil, Ferroviario y del Anticuario y la Pulpería Cultural La Federal. También merece una visita la Reserva Natural Otamendi. Informes: (03489) 407-476 /
turismo@campana.gov.ar / www.campana.gov.ar

39 Lobos
 A 15 km de la laguna de Lobos (rodeada de campings y recreos con parrillas), el centro urbano de esta ciudad atesora valiosas reliquias. Se aprecian en la plaza 1810, la iglesia, el Museo Histórico y de Ciencias Naturales y la casa natal del ex presidente Perón. Informes: (02227) 43-1450/6 /
subcom@lo.mun.gba.gov.ar / www.lobos.gov.ar

40 General Madariaga
 Artesanos, tradiciones gauchescas, pesca y dos museos sostienen la propuesta turística de esta ciudad cercana a Pinamar. La temporada arrancó este fin de semana, con la Fiesta Nacional del Gaucho, que culmina hoy. A la mañana habrá un desfile de tropillas, carrozas y gauchos de a caballo. De tarde, “Bastos y encimera” con 70 reservados, entrevero y suelta de tropillas. El cierre es desde las 21.30 con recitales del Dúo Trival, Canto 4 y Luciano Pereyra. Informes: (02267) 42-1058 /
turismo@madariaga.gov.ar / www.madariaga.gob.ar

PASEOS CON CHICOS

41 Temaikén (Escobar)
 Los senderos atraviesan los hábitats de 5 mil animales. El Acuario recrea 3 ambientes (océano, mar y agua dulce) y sus peces y flora. Entrada, $ 98; 3 a 10 años y jubilados, $ 76. Los martes, 50% más barato; estacionamiento, $ 25. Informes: (0348) 443-6900 /
turismo@temaiken.org.ar / www.temaiken.com.ar

42 Parque de la Costa (Tigre)
 A las más de 70 atracciones infantiles, familiares y de vértigo se sumaron Cara de Barro, Mini Monza, Mini Barco, Mini Sillas, Jumping, El Canguro, La Placita e Infierno 2. Pasaporte Plus, $ 102,60; tasa por derecho a espectáculo desde el 1/1/13, $ 2,40. Pasaporte Oro anual, $ 192,60. Informes: 4002-6000 / informes @parquedelacosta.com.ar /
www.parquedelacosta.com.ar

43 Mundo Marino (San Clemente del Tuyú)
 La atracción principal de este oceanario son los shows con mamíferos guiados por instructores. El espectáculo que brindan una orca y delfines incluye destrezas con una pelota, saltos y piruetas. Informes: 4325-2900 / (02252) 43-0300/2/4
/info@mundomarino.com.ar / www.mundomarino.com.ar

44 Granja Chocolatada (Pilar)
 Los niños recorren las caballerizas con instructores y aprenden las tareas que se realizan en una granja. La entrada incluye la merienda, un show circense y adiestramiento canino; el paseo en pony ; vuelta en carrusel, ; salto Crazy,. Informes: (0230) 4644-540 /
lagranjachocolatadapilar@yahoo.com.ar / www.granja-chocolatada.com

45 El Laberinto (Las Toninas)
 Tres senderos se entrecruzan y plantean dificultades para llegar a un mirador, construido sobre un mangrullo de troncos, a 10 m de altura. El paseo también cuenta con un Vía Crucis, aro de básquet, vóley, fútbol-tenis y tejo. . Informes: (156) 9354649 /
laberinto_lastoninas@yahoo.com.ar / www.laberintolastoninas.com.ar

46 Museo del Juguete (Boulogne)
 Creado por el artista plástico Jorge Meijide (Meiji) y la docente Elena André de Tufró para estimular las actividades lúdicas compartidas por niños y adultos. . Informes: 4513-7900 /
info@museodeljuguetesi.org.ar / www.museodeljuguetesi.org.ar

47 Zoo de Varela (Florencio Varela)
 Más de cien especies de fauna y otras tantas de plantas autóctonas y exóticas. Hay ciervos, leones, tigres, monos, yaguaretés, venados de las pampas, osos hormigueros, flamencos y tucanes.  Informes: (154) 9973214
zoo_florencio_varela@yahoo.com / www.florenciovarelazoo.com.ar

48 Aquarium (Mar del Plata)
 Las actividades con mamíferos se complementan con una muestra sobre la evolución de la fauna marina, un carrusel con música, aventuras y la vista del mar desde una playa con reposeras y sombrillas de paja. Informes: (0223) 467-0711 /
informe@mdpaquarium.com.ar / www.mdpaquarium.com.ar

49 Ferroclub (Remedios de Escalada)
 En el partido de Lanús, un grupo de voluntarios restaura antiguos vagones y locomotoras y exhibe algunas reliquias recuperadas. Tras el receso de enero, reabre en febrero los sábados y domingos de 15.30 a 19. Se pueden admirar piezas ferroviarias en un museo y biblioteca y,, pasear por el predio en un tren de trocha angosta;  Informes: 4202-0147 /
www.ferroclub.org.ar

50 La Isla de los Inventos (Rosario)
 Un ámbito educativo y recreativo, dirigido tanto a los niños como a los adultos y ambientado en la antigua estación de tren Rosario Central, sobre la Costanera de la ciudad santafesina. Cierra en enero y reabre en febrero, los días de Carnaval.  Informes: (0341) 480-2571 /
losinventos@rosario.gov.ar / www.rosarioturismo.com


AVENTURA

51 Kayaking (Oriente)
 En esta localidad –ubicada entre Claromecó y Monte Hermoso–, guías especializados organizan salidas en kayak por el río Mulpunleufú (o Quequén Salado) y las cascadas más altas de la provincia de Buenos Aires. La salida incluye tirolesa y mountain bike. Reservas: (02983) 15610311 /
quequensalado@hotmail.com / www.rioquequensalado.com.ar

52 Vuelo en paramotor (Cañuelas)
 Adrenalina y mucha emoción se conjugan en este vuelo en biplaza, con la compañía del instructor Marcelo Toledo. En el kilómetro 87 de la ruta 3, el parapente impulsado por un motor se eleva hasta 600 metros y sobrevuela campos y lagunas. Vuelo de bautismo (20’), . Reservas:  0920495 /
www.paramotorlabusqueda.com.ar

53 Multiaventura (Tandil)
 Tirolesa de casi 200 metros de largo, bajada en rappel en el cerro Granito y trekking sobre el faldeo del Cordón de las Animas. Los guías Carlos Centineo y Marcelo Palahi brindan charlas técnicas y proveen todo el equipo.  incluye fogón y picada.Reservas: (0249) 443-4313 /
kumbretandil@hotmail.com / www.kumbre.com

54 Bicicleteada (Pilar)
 Gustavo González organiza salidas por zonas rurales de la provincia de Buenos Aires. Para 23/2/13 anuncia una travesía nocturna de 75 km por caminos de conchilla y tierra cercanos a Magdalena.  incluye guía, asistencia mecánica y seguro; con bus desde Bs. As., $ 280. Reservas: (156) 3360326 /
bicigg@speedy.com.ar / www.biketrekgg.com.ar

55 Canopy y tirolesa (Carcarañá)
 A 40 kilómetros al oeste de Rosario (Santa Fe), un complejo de cabañas y hotel de campo sumó un circuito de cuerdas y plataformas sobre árboles y cuatro tirolesas (dos cruzan el río Carcarañá); dura 1 h. 30’ y ; bicicleta,por día; paseo a caballo (media hora),. Reservas: (0341) 155219631 /
cabanias@carcaraes.com.ar / www.carcaraes.com.ar

56 Trekking (Parque Nacional Predelta)
 Cerca de Diamante, en el sur de Entre Ríos, en este humedal con selva, islas y pajonales un sendero de mil metros de largo sugiere una caminata bordeando la laguna Irupé, hasta alcanzar una típica lomada entrerriana y la laguna Las Piedras. Trekking guiado de un kilómetro (2 hs.), . Reservas: (0343) 154614944 /
balladarescesar@hotmail.com / www.predelta.blogspot.com

57 Travesías en bote (Delta de Tigre)
 Estas salidas, que pueden ser guiadas o libres, se llevan a cabo por arroyos y ríos de la Primera Sección del Delta. También se puede elegir entre bote y kayak. Travesía de una hora y media, curso de cuatro clases de remo o kayak (dura una hora y media cada una),  Reservas: (156) 9922235
sebatula@hotmail.com / www.sculls.com.ar

58 Navegación a vela (Río de la Plata)
 Ideal para compartir con la familia o con amigos, propone una forma original de disfrutar del Río de la Plata, el Delta de Tigre y Colonia (Uruguay). Se puede elegir entre salidas diurnas y nocturnas, con luna llena, desde la ciudad de Buenos Aires o el puerto de La Plata. Reservas: (154) 4104010 /
donsala@donsala.com.ar / www.donsala.com.ar

59 Excursiones en 4x4 (Sierra de la Ventana)
 El experimentado guía de turismo Javier Gómez conduce varios recorridos por la espectacular Comarca de Sierra de la Ventana, declarada “Municipio ecológico”. Su vehículo todo terreno atraviesa la serranía, cuevas, piletas naturales, arroyos y pastizales. La excursión a Cueva del Toro y Pinturas Rupestres dura cuatro horas; astroturismo (dos horas),; cabaña para dos personas con TV cable, cocina, wi-fi, parque arbolado, parrilla y horno a leña,; para cuatro personas, para seis personas, $ 600. Reservas: (156) 7147027 / (0291) 155094696 /
info@tierraventana.com.ar / www.tierraventana.com

60 Safari fotográfico (Navarro)
 La laguna y la antigua estación ferroviaria –transformada en museo– de Navarro son dos de las atracciones de esta salida guiada por la fotógrafa Marta Strasnoy, con almuerzo en el restaurante de campo La Lechuza. Otros destinos: Chascomús, Punta Indio y el castillo La Raquel, en Castelli. Reservas: (155) 9768913 /
taller@safarisfotograficos.com.ar / www.safarisfotograficos.com.ar

PESCA

61 Recreo Keidel (Zárate)
 Excursiones por los ríos Paraná Bravo y Paraná Guazú, la isla El Dorado y Cinco Bocas, cerca de San Pedro. En verano se consigue patí, dorado, bagre de mar y, en arroyos, tararira. Hay dos muelles, canchas de fútbol, vóley y tejo, bajada de lanchas, restaurante y cabañas. Salida embarcada de día completo para 5 personas,  con nafta y equipo. Reservas: (03487) 426-335 /
recreokeidel@arnet.com.ar / www.campingrecreokeidel.com.ar

62 Reserva Curuzú Chalí (La Paz)
 En el norte de Entre Ríos, sobre la costa del río Paraná, esta reserva natural y el riacho Espinillo reservan los mejores pesqueros de surubí, dorado, patí, moncholo y amarillo. Una salida embarcada para tres personas con el guía Víctor Flores (incluye combustible, carnada, asado y gaseosas) cuesta $ 500 por persona. Bungalow para 5,. Reservas: (03437) 42-2634 /
pescadeportiva_vflores@yahoo.com.ar / www.victorflores.com.ar

63 Laguna Chasicó (Villarino)
 En el sudoeste de la provincia de Buenos Aires, la laguna Chasicó ganó fama como “Paraíso del pejerrey”. La veda, iniciada el primero de septiembre, finalizó el primero de diciembre. Chapalcó Ray ofrece hospedaje gratis, a cambio del alquiler de una lancha por dos días como mínimo. Reservas: (0291) 156434605 /
chapalcoray@infovia.com.ar / www.lagunachasicopesca.com.ar

64 Laguna Los Horcones (Gral. Madariaga)
 Pese al alto grado de concentración salina, en la laguna Los Horcones abundan los pejerreyes de gran tamaño. También es posible conseguir tararira, bagre y dentudo. Otra opción para pescar pejerrey en la zona es la laguna Salada Grande, a 20 km de General Madariaga. Informes: (02267) 42-1058 /
turismo@madariaga.gob.ar / www.turismo.madariaga.gob.ar

65 Albufera (Mar Chiquita)
 Este singular accidente geográfico –una laguna unida al mar por un canal– proporciona lenguados de apreciable tamaño, que permanecen en la boca de la albufera en procura de cardúmenes de pejerrey. En épocas de calor también se consigue lisa y corvina negra. Inf.: (0223) 460-2433 / turismo
marchiquita@cootelsernet.com.ar / www.marchiquitadigital.com.ar

66 Laguna de Gómez (Junín)
 Hay buenas posibilidades para capturar carpas en los vertederos de la laguna de Gómez, tarariras en otras pequeñas lagunas de la zona y doradillos en ríos y afluentes, cerca de Junín. Pepe Perrone dicta clases de pesca con mosca. Reservas: (02362) 15534677 /
pepeperrone@yahoo.com.ar / www.pepeflycast.com.ar

67 Laguna de Monte (San Miguel del Monte)
 El lugar indicado para procurar pejerrey, dentudo, bagre, tararira y carpa. Se pesca anclado o al garete; spinning y con mosca entre juncales. También en las lagunas Las Perdices y Las Flores Grande, arroyos y el río Salado. Informes: (02271) 40-6607 /
turismomonte@yahoo.com.ar / www.sanmigueldelmonte.net

68 Río San Javier (Cayastá)
 Mandubé, dorado y surubí son las especies que frecuentan el río San Javier, 80 km al norte de Santa Fe capital. También hay pesca abundante en arroyos y lagunas.Informes: (0342) 458-9475/7/8 /
turismo@santafe.gob.ar / www.santafe.gob.ar

69 Variada en el mar (Santa Clara del Mar)
 La excursión de pesca variada en el mar de 4 hs. con el guía Hernán Soto se hace en semirrígidos para 8 a 10 personas; $ con equipo, nafta, carnada y refrigerio. Además, pesca de tiburón con devolución. Reservas: (0223) 469-3657/ (0223) 155161911 /
ceciliamvarvuzza@yahoo.com.ar

70 Laguna Las Barrancas (Lezama)
 Muy cerca de Chascomús, en el principal pesquero de Cobo (Estación Lezama) se consiguen carpas, lisas y tarariras. Para proteger el recurso, el Concejo Deliberante y la Dirección de Turismo local impulsan un Programa de Pesca Deportiva Sustentable. Informes: (02242) 432-521 /
turismo@lezama.gov.ar

HOTELES DE LUJO

71 Cardón Miramar Links (Miramar)
 Este lujoso complejo fue construido en 1927 frente al mar por inmigrantes ingleses, que adaptaron el lugar a un típico campo de golf de 18 hoyos de Escocia. Entre otros servicios, los huéspedes también disponen de DirecTV, wi-fi, tenis y cochera. Reservas: (02291) 42-2244 /
reservas@miramarlinks.com.ar / www.miramarlinks.com.ar

72 Costa Galana (Mar del Plata)
 Lujo y glamour en la aristocrática Playa Grande. Entre sus numerosas prestaciones, ofrece servicios de spa y piscina. Además, lo favorece la ubicación, cómoda para trasladarse hasta el centro y las calles Alem y Güemes, cuyos bares, restaurantes y pubs animan la vida nocturna de la ciudad. Reservas: (0223) 431-3000 /
reservas@hotelcostagalana.com.ar  / www.hotelcostagalana.com

73 Howard Johnson (San Pedro)
 Descanso y recreación para toda la familia en el hotel con spa del centro de la ciudad y el complejo con habitaciones de lujo sobre la costanera. Spa, gimnasio y piscina climatizada; 4 d./3 n. con media pensión, actividades y uso de todas las instalaciones, $ 1.870 por persona en el hotel céntrico yen el resort de la costa. Reservas: (03329) 431-000/ 
reservas@hjsanpedroresort.com.ar / www.hjsanpedro.com.ar

74 Dazzler Camberland (Fátima)
 La principal ventaja de este hotel con 20 habitaciones –muy bien equipadas y con vista a un parque– es su cercanía con Pilar y la fácil accesibilidad desde la ciudad de Buenos Aires, por autopista. Paseos a caballo y en bicicleta. Reservas: (0230) 449-9110 /
reservas@dazzlercamberland.com / www.dazzlercamberland.com

75 Sheraton Pilar
 El moderno diseño arquitectónico armoniza con el entorno natural. Cuenta con 140 habitaciones, de las cuales 126 son de lujo, 6 ejecutivas y 8 suites. Ofrece un spa y sabrosos platos en los restaurantes Don Giovanni, Las Vasijas, La Federala y Lobby Bar. Reservas: 0800-8883535 /
ventas@pilar.sheraton.com.ar / www.sheraton-pilar.com

76 Azur Real (Córdoba capital)
 Prima el buen gusto en cada detalle de este hotel de lujo, que acaba de inaugurar servicios de spa y reabrió su restaurante, especializado en cocina de autor. El edificio fue declarado Patrimonio Histórico: cuando era un colegio, aquí cursó el Che Guevara. Reservas: (0351) 424-7133 /
info@azurrealhotel.com / www.azurrealhotel.com

77 Sofitel La Reserva (Los Cardales)
 El reparador paisaje bucólico del partido de Campana –cerca del río Paraná y la Reserva Natural Otamendi– enmarca el resort con spa, el club de campo La Reserva, una cancha de golf y una laguna. Cuenta con 159 habitaciones, dos restaurantes y un piano bar.  Incluye desayuno, kayak, bicicleta, recreación para adultos y chicos, piscina, tenis, fútbol, gimnasio, TV cable y wi-fi. Reservas: (03489) 435-437 /
sofitellareservacardales@accor.com / www.sofitellareserva.com

78 Del Casco (San Isidro)
 Elegante palacio neoclásico, construido en 1892. Fue restaurado y equipado con piscina, sauna y gimnasio. Uno de los rincones más acogedores es su patio interior, recuperado con materiales originales y mobiliario de época. Reservas: 4732-3993 /
info@hoteldelcasco.com.ar / www.hoteldelcasco.com.ar

79 Sol Victoria (Victoria)
 Servicios de primer nivel sobre las barrancas del río Paraná, en Entre Ríos. Con casino, gimnasio, piscina y golf, es la mejor base para disfrutar de “La ciudad de las 7 colinas” y sus casas centenarias, costanera y pesca.  copa de bienvenida, media pensión, masaje, entradas al Parque Termal, gimnasio, spa, piscina, estacionamiento, wi-fi y traslados. Reservas: 0800-8887070 /
info@hotelsolvictoria.com.ar / www.hotelsolvictoria.com.ar

80 Solans Presidente (Rosario)
 Entre otras comodidades, este hotel de la gran ciudad del sur de la provincia de Santa Fe está equipado con cajas de seguridad, suites con hidromasajes, wi-fi, piscina, solario, Business Center y salones de eventos con capacidad para 12 a 180 personas. Reservas: (0341) 424-2789 /
hotelpresidente@solans.com / www.solans.com

TERMAS

81 San Clemente del Tuyú
 Cuatro piscinas para grandes y chicos, con aguas termales micromedicinales marinas, paseos en cuatriciclo y minijeep, arquería, cuadripedal y minigolf. Entrada, $ 83; chicos de 3 a 10 años, $ 57. Informes: (02252) 42-3000 /
info@termasmarinas.com.ar / www.termasmarinas.com.ar

82 Federación
 Aguas bicarbonatadas, cloruradas y sódicas surgen de las 13 piscinas (dos para chicos) del más renombrado complejo termal de Entre Ríos. Para aliviar problemas reumáticos, musculares, articulares y de estrés. : (03456) 481-586 /
turismo@federacion.gov.ar / www.federacion.gov.ar

83 Carhué
 Las aguas saladas del lago Epecuén se disfrutan en hoteles y en dos balnearios; para depresión, reuma, problemas de piel y estrés; 1 d./1 n. con media pensión, piscina, gimnasio, wi-fi, bicicleta, cochera y TV cable en hotel Carhué Spa Termal, $ 339 por persona; en habitación Plus,; en suite, $ (
www.hotelcarhue.com.ar). Informes: (02936) 430-660 / turismocarhue@invertel.com.ar / www.termasdecarhue.gov.ar

84 Guatraché
 Fangoterapia e hidroterapia con aguas de la laguna Guatraché –200 kilómetros hacia el sudeste de Santa Rosa, La Pampa–, sulfatadas, cloruradas, cálcicas, magnésicas e hipermarinas. El Parque Termal cuenta con hotel y restaurante. Baño termal, $ 60. Informes: (02954) 42-4404 /
infoturismo@lapampa.gov.ar / www.termasdeguatrache.com

85 Chajarí
 Piscinas distribuidas en un parque de 40 hectáreas, a 2 km del casco urbano de Chajarí. Hay jacuzzi, bungalows y camping. Informes: (03456) 421-241 /
turismo@chajari.gov.ar / www.turismochajari.gov.ar

86 Pedro Luro
 Aguas hípersalinas surgen a 75 grados, 122 km al sur de Bahía Blanca. Pedro Luro integra el “Triángulo turístico” con el Fortín Mercedes y Parque La Salada. Habitación doble con desayuno, DirecTV, wi-fi, cochera, hidromasaje y piscinas termales en el hotel Termas de Ceferino(
www.pedrolurotermas.com.ar). Informes: (02928) 410-193 / turismo@villarino.mun.gba.gov.ar / www.villarino.gov.ar

87 Villa Elisa
 La “Ciudad jardín” de Entre Ríos cuenta con aguas cloruradas sulfatadas sódicas, en piscinas con distintas temperaturas. Dos piletas tienen hidrojet y en otra hay chorros para cervicales. Informes: (03447) 480-687 /
informes@termasvillaelisa.com / www.termasvillaelisa.com

88 Victoria
 A 2 km de la ciudad entrerriana, las aguas del complejo termal recreativo Victoria del Agua fluyen a 38° promedio.Informes: (0343) 420-7989 /
info@victoriadelagua.com.ar / www.victoriadelagua.com

89 Concepción del Uruguay
 Piletas con desniveles, solario, juegos para chicos y canchas de fútbol, vóley y fútbol-tenis. El complejo acaba de incorporar el Parque Acuático recreativo . Informes: (03442) 438-042 /
info@termasconcepcion.com / www.termasconcepcion.com

90 María Grande
 A 56 km al este de Paraná, este complejo de Entre Ríos ofrece 9 piscinas de aguas saladas mineralizadas, spa, camping y parque. . Informes: (0343) 494-0494 /
termasmariagrandesa@yahoo.com.ar / www.termasdemariagrande.com.ar

SPA

91 Delta Eco Spa (Tigre)
 Contacto directo con la naturaleza, servicios de alta gama, actividades saludables y excelente gastronomía. Este moderno establecimiento, donde priman el buen gusto y los servicios de categoría, los héspedes cuentan con veinte habitaciones, 23 cabañas, 2 piscinas (una cubierta y climatizada), jaccuzzi, restaurante, gimnasio, wi-fi y DirecTV. No admiten menores de 10 años. Cinco noches por persona, base doble, $ 3.990 con traslado desde Estación Fluvial de Tigre o Nordelta, pensión completa, bebidas sin alcohol, spa y actividades; Superior,; bungalow, . Reservas: 5236-0553 /
info@deltaecospa.com / www.deltaecospa.com

92 Torres de Manantiales (Mar del Plata)
 Junto al afamado apart hotel y los departamentos, en el Centro Spa se brindan tratamientos faciales y corporales, circuitos de belleza y masajes. Además, hay un spa de mar con agua termal marina y talasoterapia. Reservas: (0223) 486-2222 /
ventas@manantiales.com.ar / www.manantiales.com.ar

93 Cariló Village (Cariló)
 Tratamientos de relax y belleza, dos piletas cubiertas climatizadas y áreas recreativas en el bosque. El complejo está conformado por 60 bungalows, gimnasio, salas de piano y de juegos y Club House. Reservas: (02254) 470-244/5
reservas@carilovillage.com / www.carilovillage.com

94 Posada del Qenti (Icho Cruz)
 En medio de la serenidad y los coloridos paisajes de las sierras de Córdoba, este moderno spa con piscinas y un parque muy bien cuidado diseña distintos programas para relax, revitalización, nutrición y estética. Se organizan caminatas guiadas grupales. Reservas: 4314-0230 /
qenti@qenti.com / www.qenti.com 

95 Resort de Campo y Polo (Open Door)
 Además de disponer del muy bien equipado spa O3, este establecimiento rural de alta gama cuenta con 32 habitaciones, canchas de polo, juegos para chicos y exquisita gastronomía criolla y mediterránea. Se organizan cabalgatas guiadas. Día de spa, . Incluye masaje Exprés (25’), pulido de manos, almuerzo con bebida sin alcohol, piscina climatizada, tenis, fútbol, vóley, bicicleta y wi-fi. Programa “Viernes romántico”, con media pensión, spa, champán y canasta de frutas, $ 599. Reservas: (02323) 496-669 /
info@poloresort.com.ar / www.poloresort.com

96 San Ceferino (Open Door)
 En este hotel de campo 5 estrellas, el Mora Spa –decorado con objetos orientales– incluye gimnasio, sauna, baño finlandés, piscina cubierta climatizada y salas de meditación y de relax. Reservas: (02323) 441-599 /
ventas@sanceferinohotelspa.com.ar / www.estanciasanceferino.com.ar

97 Casino Melincué (Melincué)
 Este sorprendente resort y casino con vista a la laguna Melincué brinda atención personalizada de categoría, mientras celebra cinco años de su fundación en el sur de la provincia de Santa Fe. Un paquete de t res días y tres noches por persona con desayuno, un masaje facial, ducha escocesa, DirecTV, wi-fi, piscina y tenis cuesta $ 764. Reservas: (03465) 499-700 /
contacto@casinomelincue.com / www.casinomelincue.com

98 Hotel Quirinale (Colón)
 Muy completo. Dirigido por profesionales, cuenta con alta tecnología y ofrece 16 tratamientos, entre los cuales se destaca una novedosa terapia “antiage”, no invasiva. El paquete de o cho días y siete noches con media pensión, TV cable, wi-fi, piscina termal, spa, bicicleta, caminata guiada, juegos para chicos, estacionamiento, tenis y golf tiene por persona, en base doble. Reservas: 0800-5557847 /
rrpp@quirinale.com.ar / www.quirinale.com.ar

99 Aquae Sulis (Lobos)
 Agradable sorpresa en el centro de Lobos. Es una alternativa de relax y descanso, que se suma a la popular laguna. Ofrece una pileta exterior, piscina cubierta climatizada, sesiones de masajes, fangoterapia y sauna seco. Reservas: 4658-1226 /
aquaeinfo@aquaesulis.com.ar / www.aquaesulis.com.ar

100 Howard Johnson (Ramallo)
 A pasos de la ribera del Paraná, el spa de este hotel está dotado con piscina climatizada, sauna seco, baño finlandés, sala de relax, ducha escocesa y gimnasio. , desayuno, spa, gimnasio, piscina, TV cable, wi-fi y estacionamiento; en suite Junior, $ 1.300; con hidromasaje. Reservas: (03407) 422-522 /
reservas@hjramallo.com.ar / www.hjramallo.com.ar