martes, 28 de junio de 2016

USA: LAS VEGAS: la ciudad que nunca se apaga

Las Vegas, la ciudad que nunca se apaga

ando el 19 de octubre Hillary Clinton y Donald Trump se enfrenten en lo que será el último debate de la alocada carrera presidencial estadounidense, Las Vegas se cobrará su pequeña revancha. Elegida como sede del esperado duelo político, la urbe más grande del estado de Nevada será finalmente considerada, como repiten los funcionarios locales, "una ciudad en serio".

Tildada durante años capital del pecado (Sin City), la ciudad arrebatada a los indios mexicanos, fundada a principios del siglo XX en una zona húmeda del desierto de Mojave, catapultada a la fama con la legalización del juego en 1931 y conquistada poco después por la mafia, cimentó su mística enraizada en la ruleta, el alcohol y la permisividad.

Más de 50 años después de que capos del crimen organizado, como Bugsy Siegel o Lefty Rosenthal, forjaron el carácter de Las Vegas, una encuesta de 2013 indica que apenas el 15% de los que viajan hasta aquí lo hacen para apostar. El resto simplemente se deja llevar por la oferta inagotable de espectáculos, shopping, gastronomía y un cúmulo de récords que sólo un enclave que sabe reinventarse en un pestañeo puede ostentar: es la ciudad con mayor capacidad hotelera de Estados Unidos, la de más estrellas Michelin per cápita en el mundo y la que más creció en el siglo XX en todo el país. Sólo en los últimos 25 años, pasó de 500.000 a dos millones de habitantes (y cada año llegan 75.000 migrantes más).

Con nada menos que 42 millones de visitantes al año, las novedades en Las Vegas no dan tregua. Entre las últimas se encuentran la inauguración de un estadio con capacidad para 20 mil personas (el T-Mobile Arena, fundamental para el creciente número de espectáculos multitudinarios ), el restaurante del mediático chef británico Gordon Ramsay (Fish & Chips) o The Park, un bienvenido descanso con cascadas de agua y ¡árboles! bajo un sol inclemente, en medio de la jungla de cemento.

Porque el corazón de Las Vegas, The Strip -la arteria principal-, es una sucesión de rascacielos y hoteles, a cual más delirante. Primero surgieron simplemente como hoteles-casino, y hasta el día de hoy la mayor parte de los alojamientos tiene el casino incorporado en pleno lobby. A cualquier hora del día, mientras uno hace el check- in, se escucha el ding- ding de los tragamonedas, mientras los jugadores pululan en ojotas y camisas hawaianas.

Después vinieron los hoteles estilo Disney, es decir, los temáticos. Con réplicas grotescas y alucinantes a la vez de las pirámides y la esfinge de Giza, de la torre Eiffel, de la Estatua de la Libertad y del Empire State Building (con montaña rusa incluida), y hasta de los canales de Venecia, con gondolieri que cantan en italiano y todo.

Hasta el cielo es artificial en la réplica de los canales de Venecia
Hasta el cielo es artificial en la réplica de los canales de Venecia. Foto: Grand Canal Shoppes
Sobre el filo de esta década llegarían los hoteles más lujosos, los que simbolizan la nueva sangre de Las Vegas. Como The Cosmopolitan, con sus obras de arte que decoran los pasillos y la espectacular araña de 2 milllones de cristales Swarowski; el Wynn, con sus jardines tropicales, decoraciones de flores naturales (sólo el carrusel en tamaño real lleva 110 mil flores frescas), cancha de golf de 18 hoyos o la escultura en vidrio Tulips, de Jeff Koons (también el restaurante Botero está poblado de obras del artista colombiano); el Mandalay y su acuario de tiburones o el Bellagio, con sus famosas fuentes de aguas danzantes, calificadas como el mejor espectáculo gratuito de Las Vegas. Está claro que en un lugar donde la ostentación desmesurada es la norma, los hoteles se desviven por subir el nivel con toques cada vez más espectaculares.

Lo último, de todos modos, son los llamados hoteles boutique que, a pesar de tener miles de habitaciones, ostentan la condición de ser "non gaming & non smoking resorts", es decir, sin casinos ni fumadores. (Las Vegas se ha convertido en la última trinchera de los adictos al tabaco por razones obvias: la industria del juego se muestra más que complaciente con sus visitantes para que suelten billetes). Ejemplos de esta tendencia son el Delano, el Vdara, The Cromwell , The Signature , The Four Seasons, Mandarin Oriental o el Trump International (difícil creer que el magnate devenido político resignó la ganancia del juego...).

Y así como los hoteles fueron mutando de perfil, también la ciudad se alejó del rótulo pecaminoso para posicionarse como capital del entretenimiento, con shows que vienen rompiendo taquillas desde hace ya más de 20 años. Sólo el Cirque du Soleil tiene hasta siete espectáculos al unísono en distintas partes de la ciudad, y algunos, como el 0 (sobre agua), son exclusivos de Las Vegas. Love, el show con música de los Beatles, es acaso el que despliega el mejor diseño de producción de la historia del circo, con una banda sonora de excepción.

Le siguen un rosario de espectáculos, musicales, presentaciones y apariciones de viejas glorias tan disímiles como atractivas: en lo que queda de 2016 desfilarán desde el Blue Man Group hasta Jerry Seinfeld, Elton John, Santana, Enrique Iglesias, Whoppie Goldberg. Mike Tyson, David Copperfield, Lionel Richie o Jay Leno. Sin nombrar a parte del "staff permanente" de Las Vegas, como Jennifer Lopez (con su show All I Have), Britney Spears (Piece of Me) o Celine Dion. Incluso el próximo 22 de julio, la selección argentina de básquet disputará un amistoso con el Dream Team, en esta ciudad.

Más allá de los shows o el deporte (desde jugar golf en alguna de las 50 canchas de Las Vegas hasta practicar escalada en el cercano Red Rock Canyon), la ciudad de la sobrestimulación permanente también invita a vivir otros programas, lejos del despilfarro lumínico. Entre ellos:

AUTOS. Los fanáticos de la Fórmula 1 pueden ir calentando motores: inaugurado a principios de este año, Speed Vegas es un nuevo circuito de US$ 30 millones que permite a los aficionados a las carreras despacharse al volante del auto de sus sueños. Ferrari, Lamborghini, Porsche son algunas de las marcas de la flota, aunque manejar estos superautos tiene su precio: entre US$49 y US$ 89 sale la vuelta a toda velocidad por la pista. Sólo hay que contar con más de 18 años y licencia de conducir vigente del país de origen (también se puede ir como acompañante, pero tiene la mitad de gracia y de adrenalina). Para tentar a los más fierreros, se puede comprar más vueltas a medida que uno está manejando, mediante un reloj conectado a la tarjeta de crédito.

¿Dónde? A 10 minutos del famoso cartel retro "Welcome to Fabulous Las Vegas", en un predio de 40 hectáreas. www.speedvegas.com

EL GRAN CAÑÓN. Las Vegas es una de las ciudades más cercanas a esta maravilla natural. Está a 190 km en línea recta, pero por la ruta la distancia se multiplica a 390 km o casi cuatro horas de viaje. Aunque el cañón se puede explorar también a caballo, a pie o incluso en rafting por el río Colorado, una de las excursiones más populares es la que se hace en helicóptero. Desde la pequeña ciudad de Boulder, a 43 km de Las Vegas, levantan vuelo unos 14 helicópteros por hora.

Los colosales pliegues de piedra colorada no tardan en aparecer, justo después de la represa Hoover, que permitió la creación del lago Mead, con aguas del río Colorado (el embalse genera parte de la enorme cantidad de electricidad que necesita Las Vegas para convertir las noches en días). También se sobrevuela el Skywalk, la plataforma semicircular transparente que permite caminar sobre el abismo de 1300 metros (fue inaugurada en 2007 por el astronauta Buzz Aldrin, y aún genera polémica por sus altos precios y porque no permite sacar fotos ).

En las estrías de esta gran rajadura del desierto de Arizona (sí, se cruzan las fronteras del estado de Nevada) está escrita la historia natural de los últimos 2000 millones de años, la mitad de la vida de nuestro planeta. El piloto, Andrew, sintoniza música de Cold Play mientras emprende el regreso, tras una media hora de vuelo. "La próxima vez -sugiere- contraten la excursión que incluye aterrizaje y brindis con champagne en medio del cañón."

Excursión en helicóptero, desde US$ 259 (con traslados desde el hotel). El único día del año en que no hay tours es el 25 de diciembre

LAS VEGAS VINTAGE . La revista Time alguna vez describió a la calle Fremont como cool y deprimente a la vez. Las cuatro cuadras techadas y peatonales del viejo downtown (de The Srip, son unos 15 minutos en auto... o en limousine, otro típico medio de transporte local) son un despliegue de música, letreros brillantes -entre ellos el famoso cowboy de neón-, negocios de tatuajes, casinos, casas de souvenirs mediocres y los mismos personajes que abundan en las veredas de The Strip: desde un decadente Michael Jackson hasta Darth Vader o los incontables émulos de Elvis, pasando por veteranos de guerra y homeless que sólo piden alcohol ("Para qué mentir. Necesito cerveza", reza un cartel).

Pero lo mejor está arriba. En la bóveda, con sus más de 12 millones de luces led, que por las noches es también pantalla de video (con música de Queen, KISS o The Doors), y en la gente que pasa prácticamente volando en tirolesa. Se trata de Slotzilla, el zipline para colgarse de un arnés y viajar suspendido por el aire, a una altura de 36 metros. Debe de ser la única tirolesa en la que, en lugar de ver lagos o montañas, se ven cabezas (sale US$20 deslizarse por el nivel más bajo, US$40 el más alto).

La llamada Fremont Street Experience ya lleva varios años y forma parte de una iniciativa de hoteles y casinos cercanos para reactivar el turismo en la zona vieja de Las Vegas.

De todos modos, la apuesta más grande de la antigua ciudad fue la que hizoTony Hsieh, un emprendedor del comercio electrónico que amasó su fortuna al vender su sitio online (Zappos) a Amazon en 2009, a los 38 años. Poco después, Hsieh desembolsó 350 millones de dólares de su propio bolsillo con un único y ambicioso objetivo: revitalizar el centro de Las Vegas a través de un plan de recuperación urbana llamado Downtown Project.

El downtown es donde todo comenzó en Las Vegas: el primer hotel (el Golden Gate, 1906), el primer ascensor (en el Hotel Apalache, 1932), la primera calle asfaltada (1925), la primera licencia de juegos (otorgada al hotel y casino Northern Club). Cuando en los años 90 las luces y la movida se mudaron a The Strip, el downtown cayó en un agónico abandono.

Para lograr su objetivo, el Downtown Project cubre varios frentes. Desde festivales como Life is Beautiful -tres días de recitales gratuitos en septiembre- hasta la convocatoria de muralistas que plasman sus obras en paredes ruinosas (al mejor estilo Wynwood de Miami), pasando por la apertura de pizzerías veganas o librerías independientes, el proyecto busca cambiar la cara al lugar. También el Container Park, una plaza con tiendas -artesanías, peluquería, cafés- instaladas en containers reciclados, en medio de una plaza con juegos para chicos (pero diseñados para que los padres también puedan participar) es parte del proyecto. A eso se suma el hecho de que Hsieh mudó sus oficinas de San Francisco a Las Vegas, invirtió en start up tecnólogicas y abrió un hospital y una guardería. Todavía falta mucho por hacer, pero el downtown vale una visita.

DowntownContainerPark.com; http:/lifeisbeautiful.com

MUSEO DE LA MAFIA . Es cierto que los museos no ocupan los primeros lugares de la lista entre quienes visitan Las Vegas por primera vez. Pero al clásico Museo de Neón (que traza una semblanza de la ciudad a través de más de 150 letreros luminosos de casinos, moteles, restaurantes y hasta lavanderías, verdaderos monumentos kitsch al dinero y el vicio) se sumó el imperdible Mob Museum, o Museo de la Mafia, que busca reflejar la influencia que el crimen organizado ha tenido en Las Vegas .

Inaugurado en febrero de 2012 en el downtown, el museo funciona en el antiguo juzgado de la ciudad. Fue en este edificio de estilo neoclásico donde se destaparon las actividades ilícitas de muchas figuras de Las Vegas, la mayoría proveniente de las familias más importantes de la costa Este.

Además de fotos y documentos, los visitantes pueden disparar -de modo virtual- una ametralladora ligera Thompson típica de la época o escuchar grabaciones realizadas por el FBI. Entre sus piezas también figura parte del muro acribillado de la llamada Masacre de San Valentín, en Chicago (cuando fueron fusilados siete enemigos de Al Capone en 1929), o la silla de peluquero en la que fue asesinado en 1957 el mafioso calabrés Albert Anastasia.

El ex alcalde de Las Vegas, Oscar Goodman (que se interpretó a sí mismo en la película Casino, de 1995), defendió como abogado a unos cuantos mafiosos. "La mafia verdadera desapareció hace mucho tiempo -dijo alguna vez-. Por eso me hice alcalde. No tenía más clientes".

http:/themobmuseum.org Precio de la entrada (adultos) online: US$ 19,95 (si no, US$23.95). Menores de 11 a 17 años: US$ 13.95 (menores de 10 años gratis)

Elvis también usa tanga

Joni Moss Graham dice que lo vio todo en materia de casamientos. "Dar el sí quiero arriba de un helicóptero, bajo el agua, en la montaña rusa del NY NY hotel, con el juez disfrazado de Lady Gaga o incluso de Elvis... en tanga. Hasta organicé una boda en un cementerio, porque los novios querían estar junto a sus familiares muertos", detalla la risueña wedding planner y fundadora de LV Wedding Connection.

Algunos días definitivamente rompen el promedio de casamientos (Joni dice que San Valentín, Año Nuevo, Halloween y las fechas tipo 11/11/11 son extrapopulares para intercambiar anillos), y se calcula que anualmente se expiden 110 mil licencias de matrimonio en esta ciudad (cerca de 300 casamientos por día), sin contar la renovación de votos, que suma otro 20%

Fáciles, expeditivos, baratos (los paquetes cuestan entre US$200 y US$ 500 e incluyen capilla, juez, limousine, flores, música y fotos; casi todas las capillas tienen cámaras para transmitir la ceremonia en vivo), los casamientos se pusieron de moda en Las Vegas a partir de los años 50, cuando parejas famosas, como Elvis y Priscilla Presley, Paul Newman y Joanne Woodward o Frank Sinatra y Mia Farrow, celebraron aquí sus bodas. En la ciudad hay más de 500 capillas -incluso las tienen los casinos y grandes hoteles- que permanecen abiertas hasta medianoche.

En tiempos más recientes, desfilaron ante el oficiante de bodas desde Pamela Anderson y Carmen Electra hasta Britney Spears, con diferentes niveles de duración en sus respectivos compromisos.

"Hollywood no deja muy bien parada a la industria del matrimonio, hace que todo parezca una farsa -se queja Joni-. Pero es verdad que hasta la mala publicidad no deja de ser publicidad. El día en que se conoció la noticia de la boda de Britney (que duró apenas 55 horas), el teléfono no paró de sonar. Fue una locura la cantidad de gente que se casó por esos días."

Y si bien sí, casarse en Las Vegas puede ser divertido y hasta excéntrico, la wedding planner no deja de subrayar un punto fundamental: los votos son los votos, y el casamiento allí es tan legal como casarse en el registro civil a la vuelta de tu casa. www.lvweddingconnection.com

Dónde comer

Sushi Samba. Fusión de cocina japonesa, peruana y brasileña, el restaurante tiene sucursales en Miami, Nueva York, Londres y Chicago. Entre sus platos hay sushi de quinoa (además del tradicional), moqueca, ceviche, anticuchos, yakitori o salsas de ají panca. www.sushisamba.com/location/las-vegas

Buddy V's Ristorante. El célebre pastelero Buddy Valastro (conocido por su reality show Cake Boss) abrió en 2014 su primer restaurante en la ciudad. Decorado con platos de amasar, latas de fideos o paquetes de harina, ofrece las recetas de la familia Valastro y los clásicos platos ítalo-americanos. El chef, Christian González, es hijo de padres argentinos. buddyvlasvegas.com/

Beerhaus. Ambiente relajado, cervezas artesanales, hamburguesas y salchichas caseras son el sello del recién inaugurado espacio, que también cuenta con metegol, ping-pong y juego de jenga. www.theparkvegas.com/en/restaurants/beerhaus.html

Triple George Grill. En downtown, es un clásico que se mantiene abierto desde 1964. Con amplios boxes y maderas oscuras, sus martinis son de leyenda y su comida ha sido varias veces premiada. triplegeorgegrill.com/

Carmine's. Cocina del sur italiano de grandes porciones, en un enorme comedor decorado con fotos en blanco y negro. El local original está en el Upper West Side de Manhattan y éste, dentro de The Forum Shops at Caesars. www.carminesnyc.com/locations/las-vegas/

Shopping

Las Vegas ofrece opciones para diferentes tipos de bolsillo, desde los outlets en las afueras de la ciudad hasta el lujoso Grand Canal Shoppes. Inspirado en Venecia -con cielorrasos iluminados, canales internos y una réplica de la plaza San Marco-, este centro comercial reúne diseñadores y tiendas exclusivas (no falta ninguna de las grandes marcas). Los paseos en góndola son tan populares como los mismos gondolieri, que cantan en italiano clásicos como "Volare" o "Santa Lucía" (góndola para dos, en privado, US$ 84). https: /www.grandcanalshoppes.com/en.html

lunes, 27 de junio de 2016

CHILE: SANTIAGO: meca del turishopping

Santiago, meca del turishopping
La capital chilena se consolida como destino de compras para los argentinos, que ya son los extranjeros que más la visitan y también los que más gastan en sus malls

SANTIAGO DE CHILE.- Inclinada sobre una enorme valija en la entrada del Mall Costanera Center, de esta ciudad, una joven argentina reclama: "Acá las grandes marcas no tienen todos los productos que salen en la web". Una de sus tres amigas la mira, ríe y le dice: "¡Pero mirá esa valija, si te compraste todo!". Luego gira y agrega: "Está mucho más barato, allá las cosas cuestan el doble", antes de salir apurada para alcanzar el transfer a su hotel.

Los argentinos que vienen en plan turishopping a Santiago de Chile ya son reconocibles por algo más que el acento: andan muy temprano o a la hora de cierre en los centros comerciales, cargados con bolsas o valijas con rueditas, llenas de compras.

Entre enero y marzo se consolidaron como los extranjeros que más visitan Chile (subieron el 61,2% respecto de 2015) y que más gastan (compraron 160% más con tarjetas que el mismo período del año anterior).

Según Bernardita Silva, gerenta de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio de Chile, la explosión de los argentinos es inédita y esperan que se mantenga. Los factores que más favorecen el fenómeno son el término del cepo cambiario, el peso argentino mucho más fortalecido que el chileno frente al dólar y la eliminación del impuesto a las compras en el exterior para las tarjetas de crédito.

Zapatillas, ropa de marcas que no hay en la Argentina, como H&M, Forever 21 y GAP, televisores y celulares son los productos que más buscan en los negocios. Los tipos de comercio preferidos son tres: están las multitiendas como Falabella, siempre ubicadas en los malls, las marcas exclusivas, como Tiffany, Gucci o Armani, que tienen ahora un Distrito del Lujo en el mall Parque Arauco, y los outlets, que están en Quilicura, media hora al norte del centro de Santiago.

Locos por las marcas

Carmen Munita, gerente de marketing de Arauco Premium Outlet Buenaventura, donde hay más de cien tiendas de marcas premium, dice que los descuentos llegan hasta al 70% y que tienen en promedio 300.000 visitas mensuales. "Treinta por ciento de estas corresponden a extranjeros, mayoritariamente de Brasil y Argentina, que van a este tipo de centros comerciales a buscar ofertas más económicas en su país", explica y cuenta que los argentinos son los que han tomado más protagonismo en las compras en el último tiempo.

Las marcas que más buscan son Nike, Adidas, Tommy Hilfiger y Andes Gear. Los hoteles ofrecen traslados y se puede acceder a programas de descuentos exclusivos para extranjeros en turismoutlet@parauco.com.

Gerónimo de los Heros, su hermano Manuel y Lucila Paradiso, la madre, son de Capital y están cerrando su jornada de compras en el Costanera Center. Vinieron por electrónica y ropa, pero también estuvieron de paseo. Aprendieron que el subte es la mejor forma para desplazarse en Santiago y ellos mismos organizaron dos paseos: uno a Isla Negra, en el litoral, y otro a Los Dominicos, un sector de Las Condes, en Santiago. Gabriela y Graciela también son de Capital y también tomaron un tour a la costa, pero con Despegar. El paquete incluye los tickets aéreos, cuatro días en Santiago y un tour a Valparaíso y Viña por 12 cuotas mensuales de 390 pesos argentinos. Este es su segundo día, eligieron las compras y va todo bien.

La voz de la experiencia

Todos los turistas argentinos consultados coincidieron en cinco cosas: la cantidad de días perfecta en Santiago es cuatro, hay que tener cuidado con el cambio al pagar, la comida es cara, pero se puede buscar previamente alternativas, lo que aparece en Internet como oferta en tiendas será más caro, y para ir de shopping y encontrar lo que uno busca, hay que hacerlo temprano, cuando abren los malls.

El la ciudad hay más y nuevos malls: el Casa Costanera, en Vitacura; Plaza Egaña, en Ñuñoa; Portal La Dehesa, en Lo Barnechea. Un dato extra que descubrieron Gabriela y Graciela: "en la calle MacIver, centro de Santiago, está lleno de ópticas con los marcos de lentes muy, pero muy baratos". Del mall eligieron las zapatillas Adidas, que están a la mitad que en Buenos Aires, como lo más conveniente.

En el Costanera Center las tiendas con más argentinos por día después de Falabella son H&M, Gap y MacOnline. Marlen Flores, jefa de ventas en Gap, cuenta que el producto favorito de los argentinos es... "todo lo que tiene el logo bien grande". Los buzos, por ejemplo, salen de a dos, de a tres y "hay personas que se llevan hasta nueve". Las promociones en la tienda se renuevan todos los jueves. Y si de lunes a jueves llegan hasta 2500 personas, el fin de semana puede llegar a 4000.

En MacOnline, el jefe de piso, Pablo Zavala, asegura que cerca del 40% de su venta es a clientes argentinos. Su producto estrella es el iPhone, pero hace una advertencia: el 5S funcionará solamente en Chile, con la banda 4G chilena, y no con la argentina. "Pese a que se lo advertimos a todos los clientes, de todas formas lo compran, allá lo regalan y después llaman para reclamar que no funciona. El que tampoco vamos a tener es el iPhone SE, porque a nivel mundial ya no está llegando".

Precios comparados

La recomendación de los argentinos que se adelantaron a las vacaciones es buscar antes buenos datos en Internet. En Santiago es fácil, ya que los chilenos se están acostumbrando a vivir pegados a las redes sociales. Uno aterriza en Nuevo Pudahuel y ya tiene wifi gratis y hasta puede descargar libros para matar la espera. Uber conviene más que los taxis, que ya son baratos, y todos los malls tienen community managers que responden todo tipo de consultas en Twitter y Facebook.

Además, en casi todos los malls hay tarjetas de descuento exclusivas para extranjeros. Hay que buscar el módulo de atención (en el Costanera Center es en el nivel 2), mostrar un documento de identidad extranjero, y pedirla. Al salir del país, los argentinos tienen un impuesto de aduana cuando las compras sobrepasan cierta cantidad de dólares (150 dólares para adultos y 75 para menores de edad). En ese caso se paga extra el 50% del excedente, pero así y todo, y en esto coinciden todos, sigue siendo entre 30% y 50% más barato comprar en Chile.

Federico Luna sacó bien las cuentas y se lleva una tele LED de 42 pulgadas por 3350 pesos argentinos (lo encontró en oferta en un supermercado; "en Buenos Aires cuesta más de 6500") y la X-Box 360 full por 4800 pesos argentinos (7600 en la Argentina), y todavía le faltan las zapatillas, que tendrán descuento extra por el Día del Padre.

Comer y pasear

Existen también opciones probadas por argentinos para comer barato y bien en Santiago (picadas), y también tours cortos ideales para no estar todo el día mirando vidrieras.

Santiago a Pata (santiagoapata.cl) ofrece recorridos patrimoniales guiados a pie por el centro. Hay uno que parte en el Club Hípico y termina con un buen almuerzo en el Zully, uno de los restaurantes recomendables del centro. Hay también caminatas gastronómicas y tours a medida del participante. Salir a esquiar a los centros invernales o a las viñas del valle de Casablanca, camino a Valparaíso, son otras escapadas clásicas que duran un día y están a muy buen precio.

Otro local que está sorprendiendo es el Mila, un restaurante nuevo en el mall Alto Las Condes, local que en tres meses solo lleva elogios y está próximo a abrir en Costanera Center, el mall más grande de Latinoamérica. Natalio Bainttein, el dueño (es de Córdoba), dice que la especialidad es obviamente la milanesa, "que se extraña mucho", y que "se está corriendo muy rápido la voz, porque no hemos hecho nada de publicidad y, de todos modos, estamos a pleno".